Con un triplete de artillero uruguayo Luis Suárez, quien compensó con creces la ausencia de Lionel Messi y Neymar, Barcelona goleó a Guangzhou Evergrande 3-0 el jueves para clasificarse a la final del Mundial de Clubes, en la que enfrentará a River Plate de Argentina.
Suárez puso en ventaja a Barcelona poco antes del descanso, al rematar un despeje del portero Li Shuan tras un violento remate a portería de Ivan Rakitic.
El uruguayo elevó la cuenta a los 50 minutos al parar con el pecho un pase de Andrés Iniesta y definir de volea.
Concluyó su faena con un penal después que Huang Bowen derribó a Munir El Haddadi en el área.
Messi sufre un cólico nefrítico, un tipo de dolor abdominal que suele atribuirse a cálculos en los riñones, dijo el club. Su participación en la final del domingo «dependerá de su evolución», agregó el Barça.
«Espero que Leo se recupere lo más rápido posible», dijo Suárez después del partido.
Neymar, que se recupera de una lesión en el aductor derecho, permaneció en el banco.
Guangzhou, dirigido por el técnico brasileño Luiz Felipe Scolari, llegó a la final del jueves con una racha de 28 partidos sin derrotas.
Barcelona buscará el domingo establecer un récord de tres mundiales de clubes ganados, después de los de 2009 y 2011.
Suárez sostuvo que el rival River Plate «por algo ganó la Copa Libertadores, es uno de los grandes de América. Ahora esperemos dar un buen espectáculo y llevarnos la copa».