Los Marinos de Anzoátegui hicieron oficial el regreso del pívot estadounidense Garret Siler a sus filas, tras haber contribuido al título del acorazado oriental en la campaña 2015 de la Liga Profesional de Baloncesto (LPB).
Siler, de 29 años de edad y 2.13 metros de estatura, promedió 9.9 puntos, 5.8 rebotes y 1.3 bloqueos en 12 juegos con el equipo entonces entrenado por el argentino Fernando Duró. Se combinará con el también estadounidense Denzel Bowles en la zona pintada y ambos recibirán apoyo de Keving Palacios, Jesús Urbina, el recién adquirido Pedro Brito y el hispano venezolano Germán Gabriel.
Apodado “Big G”, el exNBA Siler fue clave en su match up contra Gregory Echenique durante la gran final en la que el acorazado oriental dispuso de los Guaros de Lara. “Es un jugador que ya demostró de lo que es capaz en esta liga. Tendremos aún más fuerza en la pintura”, manifestó Gianni Patiño, vicepresidente del equipo.
Gabriel motivado
Por su parte, Germán Gabriel ofreció declaraciones al departamento de prensa de Marinos desde España, en las que se confesó motivado por el hecho de volver a la LPB, en la que ya fue campeón en la estación 2014.
“Me encuentro preparando todo para mi viaje a Venezuela y estoy muy emocionado por jugar en la LPB. El año pasado fue muy difícil para mí, tuve que ligar desde afuera el nuevo título del equipo. Se está construyendo una gran plantilla. Vamos a jugar con un nivel intenso y compartiremos mucho la bola”, aseveró.
Gabriel reveló que tiene experiencia previa con el coach español Sergio Valdeolmillos. “Hace 15 años trabajé con el coach y doy certeza de que es muy metódico y se entrena muy duro con él”. Considera que la LPB es “muy rápida, física y emocionante” y que “el público es grandioso y llena cada gimnasio”.
Pese a que viene de vestir la camiseta de un poderoso e histórico quinteto en la liga ACB de España como el Unicaja Málaga, respeta la “jerarquía” de la camiseta de Marinos.