La muerte llegó inesperadamente a la familia Mogollón la mañana del sábado, cuando Anibal Antonio Mogollón Torres (43) salió de la casa en el sector La Pastora en su carro, a comprar unas empanadas para desayunar.
Sólo minutos pasaron cuando llegaron avisándole a la familia que a Anibal lo habían herido a pocos metros. En medio del desespero salieron para ver que había pasado y pudieron trasladarlos hasta la emergencia del Hospital Central Antonio María Pineda, ingresó con vida a las 6:50 de la mañana, pero con múltiples heridas por arma de fuego.
La esposa pertenece a un grupo cristiano con actividad en la misma comunidad y al conocerse la noticia de lo que había sucedido los integrantes iniciaron una cadena de oración para que se salvara, pero las graves heridas cobraron la vida de Anibal y a las 8:00 de la mañana avisaron que había fallecido.
Tenía un taller de mecánica en su propia casa y con eso trabajaba desde hace varios años.
Conocidos lo definieron como una persona familiar, responsable y seria con su trabajo, desconocen que pudo haber pasado y si fue para robarlo. Tenía dos hijos.