El picheo aragüeño fue mucho para Lara y copó la escena al acreditarse un claro triunfo, 5-1. No pudo el bando local con el invicto Marcus Walden, controlado y capaz de sortear un par de situaciones de dos en bases en el tercero y el cuarto.
Con su efectiva sinker indujo ocho rolatas y desde el tercero solo le conectaron un hit. Se cansó en el séptimo, golpeó a Orlando y Noriega le reventó doble por la derecha para romper el blanqueo. No menos eficaz estuvo el trío de relevista de los Tigres, sin recibir imparable en 2.2 entradas.
César Jiménez fue rival de Walden durante cuatro tramos, pero a partir del quinto no tuvo el mismo dominio. Dobles de Güez en el quinto y Escobar en el sexto fueron claves para hacerles carreras. Si habían esperanzas de alcanzar y remontar, estas desaparecieron con el ataque frente a un Yoervis Medina que no termina de recuperar su categoría en el montículo. Aragua es un club que ahora se muestra compacto con el ingreso de jugadores muy calificados.
Curiosamente ha ganado la mayoría de sus compromisos como visitante, entre ellos cuatro de cinco frente a Cardenales, ante el cual cayó cuatro veces en Maracay. Anoche durmió la ofensiva roja.
Sus cuatro primeros bateadores se fueron de 16-0 y sólo Paulo Orlando tuvo la vista clara y se embasó en cuatro ocasiones. Mérito absoluto, pues, para el pitcheo de los felinos. En la clasificación combinada, Cardenales empata el cuarto con Bravos, la misma ubicación que tiene en la segunda vuelta.
El club guaro amaneció en Maracaibo y hoy desde las 4pm tendrá par de juegos con Michale Lee y Néstor Molina en el montículo. Una división basta para mantenerse lejos de un rival directo como el Zulia.