Un amplio sector del liderazgo cristiano en el mundo, que se “ungen” como pastores, se han dado cuenta que predicar acerca de la prosperidad cristiana es un “filón de oro” que le produce enormes ganancias materiales. No tienen una pizca de rubor para llenar de falsas expectativas sus prosélitos y forzarlos a vaciar los bolsillos en su favor. Lo más triste de esto, es que en sus elocuentes prédicas utilizan textos bíblicos sin su respectivo contexto para sostener sus aberraciones. Una de las locuras que predican, es que en cada uno de nosotros los seres humanos existe un Dios en potencia. ¿Cómo les parece?
El pastor y apologista estadounidense Justin Peters expone algunas de las lecciones claves de la teología de la prosperidad. Y denuncia, que los líderes y predicadores de este movimiento, a los cuales menciona como, Benny Hinn, Kenneth Copeland, Joel Osteen, Myles Munroe, Joyce Meyer y otros, son todos falsos profetas, y predicadores no bíblicos. Justin fue categórico al afirmar que este tipo de enseñanza se basa en una interpretación errónea del texto bíblico. “Ellos [los “profetas de la prosperidad”] enseñan que si hemos sido creados a imagen y semejanza de Dios, también somos dioses, o tenemos una naturaleza divina. Pero esto no es cierto. Varias veces en las Escrituras, vemos que Dios es enfático en que es el único Dios, un solo Señor, y que el hombre no es igual a él. Pensar que tenemos una naturaleza divina es una blasfemia”. El lector puede ampliar esta información en Noticias Cristianas.com.
Lo triste, lo grave y peligroso, por cuanto estos individuos están caminando por el borde del precipicio, es que esta práctica de una u otra manera se ha generalizado por todo el mundo. Lo cual solo sirve a los intereses de “pastores” que solo tienen en mente hacerse de dinero fácil. Y es fácil, por cuanto cuando se predica y predica y se sigue predicando, que las bendiciones de Dios solo llegarán si Ud. tiene un espíritu dadivoso, por lo cual Dios “quiere que Ud. de, de y de todo”, los feligreses, muchos desesperados por recibir un milagro, vacían sus bolsillos para el beneficio de estos falsos pastores y profetas del Evangelio. Dios ya lo había alertado. “Y muchos falsos profetas se levantarán, y engañarán a muchos”. Mat.24:11
«El Salvador predijo que en los últimos días aparecerían falsos profetas que arrastrarían discípulos tras sí; y también que los que en este tiempo de peligro debieran permanecer fieles a la verdad que está especificada en el libro de Apocalipsis, tendrían que enfrentarse con errores doctrinales tan sutiles que, de ser posible, engañarían a los mismos escogidos.… Estos falsos profetas, que pretenden ser enseñados por Dios, tomarán preciosos pasajes de las Escrituras que han sido dados para adornar la verdad, y los usarán como vestiduras de justicia para cubrir teorías falsas y peligrosas. Pero Dios hará que todo sentimiento verdadero prevalezca” Libro. Cristo en su Santuario. Elena de White. “Velad y orad…” ¡Esa es la clave! ¡Hasta el próximo martes Dios mediante. Continuará…
