Las actividades académicas en la UCLA han sido afectadas por factores que no dependen de las autoridades de la institución, por cuanto la situación comenzó como consecuencia de la ausencia de un acuerdo definitivo en las negociaciones de la II convención colectiva de los trabajadores, la cual fue discutida por los gremios con representantes del Ministerio de Educación Superior; y como resultado de la emergencia académica administrativa anunciada por la UCLA desde el mes de junio del presente año ante las instancias correspondientes, sin que se haya recibido respuesta alguna hasta los momentos.
De esta manera respondió el rector de la UCLA, el profesor Francesco Leone a la carta enviada por el Ministro de Educación Universitaria, Manuel Fernández, en la que le solicita que exponga las razones técnicas y administrativas por las cuales esta casa de estudios no ha dado inicio las clases en el período académico 2015-2016.
El rector expuso que las actividades académicas en la UCLA se desarrollaron con normalidad en el lapso enero-julio y que en el mes de agosto se dio cumplimiento a los cursos intensivos.
Recordó que el 30 de junio del presente año, la UCLA envió al Ministerio de Educación Universitaria una solicitud para que se tramitaran los créditos adicionales correspondientes para atender las necesidades acumuladas de la institución en materia de infraestructura física y tecnológica, equipos e insumos para garantizar las condiciones laborales adecuadas para los trabajadores y para el ejercicio de una academia de calidad.
Asimismo se refirió a la invitación que se le hizo al Ministro de Educación Universitaria, Manuel Fernández , el 28 de julio de 2015, para que participara en una sesión del Consejo Universitario, de la que no se obtuvo respuesta, aun cuando este encuentro tenía como finalidad tratar lo relacionado con las insuficiencias presupuestarias para infraestructura física y tecnológica, y las dificultades que enfrenta la institución para la consecución de las divisas destinadas a la compra de reactivos requeridos en los laboratorios, así como para el pago de la matrícula de estudiantes en el extranjero.
Otra de las causas que limita el desenvolvimiento de las actividades académicas, según explicó Leone, es la ausencia de los recursos para cubrir las providencias estudiantiles, de comedor y transporte, ante lo cual se envió el oficio fechado el 24 de septiembre de 2015 y numerosos mensajes de texto al Ministerio de Educación Universitaria, al vice ministro de este despacho, a la directora de la Oficina de planificación del Sector Universitario, y la única respuesta recibida es que tales recursos se encuentran en trámite.
Son numerosas las gestiones que ha realizado la UCLA con la finalidad de impedir que las condiciones degeneraran en una crisis que impidiera el normal desenvolvimiento de las actividades, entre esas gestiones se encuentra la reunión sostenida en el Ministerio de Educación Universitaria, en Caracas el pasado 14 de octubre, por la vicerrectora académica de la UCLA, Prof. Nelly Velásquez, quien acompañada por los representantes de los gremios de profesores, empleados y obreros y de la representación estudiantil de la UCLA, presentó la problemática ante la comisión nombrada por el viceministro de educación Jeyson Guzmán, y se entregaron a la asistente del viceministro, Erika Paredes los documentos en los que se plantean las solicitudes presentadas con anterioridad ante ese despacho.
Frente a esta situación el viceministro se reunió con las autoridades, el equipo de trabajo de la UCLA y representantes del sector estudiantil, encuentro en el que se lograron acuerdos de solución que serían debidamente canalizados a través del Ministerio de Educación Universitaria.
En tal sentido, indicó que solo se ha recibido un oficio enviado el 27 de octubre del presente año, en el que se asigna a la Universidad 7.000.000 de bolívares, cantidad que alcanzaría para cinco días de comedor de todos los estudiantes de la UCLA.
La emergencia académica en la UCLA continúa en la espera de las respuestas pertinentes por parte del Ministerio de Educación Universitaria, a fin de lograr las condiciones necesarias para que tanto el área académica como administrativa se desenvuelvan con normalidad.