El presidente venezolano, Nicolás Maduro, denunció este jueves ante la ONU un “acoso permanente” para tratar de “aislar” a Venezuela, después de que el Alto Comisionado de Derechos Humanos expresara “serias preocupaciones” sobre la imparcialidad de la justicia en ese país.
“Hoy Venezuela enfrenta un acoso permanente y la mala utilización, la manipulación del tema de los derechos humanos (…) para intentar aislar a nuestro país”, declaró Maduro, en un discurso pronunciado ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra.
“No es la primera vez que algún funcionario por ahí lanza acusaciones temerarias (…) contra la patria de Simón Bolívar”, añadió el presidente venezolano durante ese encuentro celebrado a petición de Caracas.
Antes del discurso de Maduro, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Al Hussein, de viaje, envió un mensaje por vídeo en el que expresó “serias preocupaciones” sobre la “imparcialidad de los jueces y fiscales en Venezuela”.
Zeid aseguró que los casos del líder opositor Leopoldo López, encarcelado en febrero de 2014, y de la jueza María Lourdes Afiuni, que obtuvo en 2013 la libertad condicional tres años y medio después de ser detenida por un caso de supuesta corrupción, son “ilustraciones evidentes” de esa falta de imparcialidad.
Varias víctimas y opositores venezolanos habían presentado el miércoles una solicitud ante la fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI) para que investigue a Maduro y a altos funcionarios de su país por “delitos de lesa humanidad”, unas acusaciones a las que no hizo alusión el presidente en su discurso.
Líder del ala radical de la oposición venezolana, López fue condenado a 13 años y nueve meses de cárcel en septiembre por incitar a la violencia durante las protestas para forzar la renuncia de Maduro, que entre febrero y mayo de 2014 dejaron 43 muertos.
“En el primer semestre del año 2014, se desplegó una operación violenta, se incendió medio país, 43 víctimas mortales. Uno por uno los casos han sido investigados y juzgados en el poder judicial venezolano, al cual exijo respeto de quienes lo atacan de manera ruin y cobarde”, clamó Maduro.
Intento de desviar la atención
Estados Unidos calificó el discurso de Maduro de “claro intento de utilizar el Consejo de Derechos Humanos de la ONU para desviar la atención de las propias acciones del gobierno para restringir las libertades fundamentales”, dijo el portavoz de la embajada Paul Patin.
Zeid también expresó su “preocupación” por la “intimidación, amenazas y ataques a periodistas, defensores de derechos humanos y abogados”.
“El video de Zeid es una falta de respeto hacia Venezuela, se le pidió que tuviéramos una reunión y él nunca contestó, ese señor no puede ser juez y parte”, dijo Maduro a un grupo de “países amigos”, en una reunión a puertas cerradas, antes de abandonar la ONU con su esposa, Cilia Flores, sin hacer declaraciones, indicó a la AFP una fuente diplomática venezolana.
En su alocución, Maduro tampoco se refirió al arresto de dos sobrinos de su mujer que deben comparecer este jueves ante el juez en Estados Unidos por conspirar para introducir cocaína en ese país.