Carmelo Cortez, presidente de la Federación Venezolana de Baloncesto (FVB), aseveró este miércoles en visita a la ciudad de Barquisimeto que las negociaciones que se llevan adelante con la junta directiva de la Liga Profesional de Baloncesto (LPB) con respecto a fecha de arranque y número de importados en cancha en su siguiente edición “están en un punto muerto” y que “no hubo ningún tipo de acuerdo en la reunión del pasado lunes”.
Cortez estuvo en la capital larense para recibir un homenaje por parte de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA) y reveló las impresiones que se llevó Alberto García, secretario general de FIBA Américas, tras asistir a las reuniones como mediador.
“Alberto García no se fue muy contento con lo ocurrido. Las posiciones de la liga y las nuestras no fueron de su agrado. Cree que pudo haber situaciones de encuentro que no fueron aprovechadas”, detalló.
El directivo oriundo de Sucre dice “no estar convencido” de que los equipos deban jugar con tres extranjeros. “Debemos darle mayor oportunidad a los jugadores venezolanos. Sabemos que esto es un negocio pero estamos comprometidos con el deporte que todos queremos. Si vamos a hacer espectáculo podemos hace un circo en cualquier otro lugar. Si vamos a combinar deporte con espectáculo y planificación, debemos respetar las reglas y a la autoridad”.
Considera que “es inconcebible que cuando empieza un partido de baloncesto en una cancha venezolana, haya seis extranjeros y cuatro criollos. Eso atenta contra la conformación de la selección nacional y el desarrollo de nuestros jugadores”.
Cortez informó que no hay nuevas reuniones pautadas y que se han comunicado con Pedro Infante, ministro del Deporte. “Me siento comprometido a buscar la solución lo más pronto posible y estamos abiertos a un llamado para ver cuál será”.