El antesalista Carlos Rivero tuvo la mejor jornada de su carrera en la LVBP en cuanto a producción el pasado martes por la noche frente a Tiburones de La Guaira, al remolcar siete anotaciones.
El slugger dejó atrás el mal momento que lo acompañaba en los últimos juegos de la semana anterior al completar un juego de tres indiscutibles y quedarse a un triple de la escalera.
Las siete producidas le sirvieron al barquisimetano para igualar el record de la franquicia de más impulsadas en un juego. Ahora lo comparte con Robert Pérez (2002) y Selwyn Langaigne (2004).
Rivero llegó a 18 remolcadas y cuatro jonrones y se coloca segundo en ambos departamentos.
Los tres primeros lugares en el departamento de impulsadas de la liga pertenecen a los pájaros rojos. Rangel Ravelo (21), Carlos Rivero (18) y Jairo Pérez (17).
“Al principio trataba de poner mucho en cada turno y entendí que no puedo hacer más de la cuenta”, dijo Rivero al periodista Gabriel Rodríguez antes del juego de anoche frente a Leones del Caracas en el parque de la Ciudad Universitaria.
“Simplemente quiero ayudar a que Cardenales llegue a una postemporada”, destacó el tercera base de los pájaros rojos.
Rivero fue la figura ofensiva del equipo el año anterior cuando lideró la LVBP en cuadrangulares y carreras remolcadas.
Este año el peso ofensivo no recae exclusivamente sobre sus hombros, al contar con el aporte de Ravelo, Pérez y el propio Héctor Giménez.
Por otra parte, Leon Landry fue colocado en la lista restrictiva de 14 días de Cardenales de Lara, para abrirle paso al recién llegado outfielder Chad Oberacker.
Landry no pudo responder con el bate y apenas ligó para .217 en 43 turnos. No está previsto que regrese al equipo.