La semana comenzó movida en un sector del norte de Barquisimeto debido a que este lunes, mujeres y hombres de varias comunidades cerraron vías reclamando mejoras en servicios públicos.
A las seis de la mañana, un grupo de ellos se ubicó en el puente de El Trompillo, impidiendo el tránsito automotor en ambos sentidos, por la Circunvalación Norte, afectando a numerosos conductores, sobre todo del transporte pesado, de paso por la capital larense, procedentes del centro, oeste y sur, quienes debieron desviar sus rutas o esperar pacientemente el cese de la protesta.
Un piquete de la Guardia Nacional, con los respectivos implementos antimotín, acudió al lugar y trató de disolver el grupo de manifestantes mediante el diálogo, pero luego les obligó a retirarse bajo amenaza de ser detenidos.
Ante la amenaza de la autoridad, obligada a despejar la Circunvalación, el grupo se trasladó hasta la vía a Carorita por El Trompillo donde permaneció hasta luego de las diez de la mañana cuando, ante una nueva arremetida de los uniformados, tuvieron que dispersarse.
Los manifestantes explicaron que tienen más de quince días sin recibir una gota de agua por tuberías o cisternas, lo que les tiene desesperados.
«Son más de dos mil familias de Colinas de El Trompillo, José Cruces, El Cardonal y otros sectores de la zona que nos estamos muriendo de sed y nadie hace nada para ayudarnos, sólo nos mandan la guardia a reprimirnos”, dijo una de las jóvenes protestantes.
Responsabilizaron a las personas encargadas de abrir las llaves de lo que está ocurriendo, así como al del llenadero por no enviarles suficientes camiones cisternas.
Mientras eso ocurría en El Trompillo, en la parte alta de la urbanización Eligio Macías Mujica, otro grupo de mujeres y hombres protestaba por el mal servicio que, supuestamente, prestan los dueños o conductores de busetas de las rutas 8 y 3.
Con restos de árboles, basura y cauchos, impidieron durante unas dos horas el tránsito automotor en la parte alta.
Explicaron que algunos conductores de la Ruta 8, con la anuencia de la alcaldía, han dividido el recorrido en dos partes, obligando a los usuarios a pagar un segundo pasaje después de barrio Unión.
Además, se quejan de que no cuentan con el servicio después de determinada hora de la tarde.
La misma situación estaría ocurriendo con la Ruta 3, cuyos conductores, de acuerdo a denuncia de Samuel Márquez, no respetan el pasaje preferencial.
Testimonios
Arianny Vásquez: Mucha sed.
Para esta ama de casa, la falta de agua en Cerro Gordo, donde reside, les tiene desesperados pues no tienen ni para preparar los alimentos desde hace unos cuantos días.
«Antes nos llegaba un día a la semana por las tuberías, pero ahora no nos llega nunca y tampoco recibimos agua por los camiones cisternas”, afirmó.
Nelson Núñez: No tenemos vida.
Como jefe de familia, este trabajador recordó aquello de, «el agua es vida, no la malgaste”, pero las familias de El Trompillo no reciben ni gotas del líquido vital, salvo cuando llueve.
Pidió a la gente de Hidrolara investigar lo que pasa con la distribución en la zona pues desde hace días no le llega a nadie y por eso la protesta llevada a cabo la mañana del lunes.
Pedro Orduz: Soluciones
El dirigente social del norte espera que en el Concejo Municipal o la Alcaldía resuelvan el problema que están confrontando con el transporte colectivo hacia la Macías Mujica y sectores inmediatos, que deja mucho que desear.
Dijo que el caso ya fue planteado a la AMTT pero su titular les ha dejado esperando la solución que consiste en llamar la atención a las directivas de las rutas.
Samuel Márquez: Estudiantes
El joven se siente afectado por el trato que reciben de algunos conductores que pretenden desconocer los acuerdos con la AMTT con respecto al pasaje preferencial, que no respetan.
Pide a ese organismo fiscalice las unidades de la Ruta 3 y constate lo que está pasando con el cumplimiento de los recorridos a los que están obligados.