Explicaremos previamente lo que sigue: la Tierra, nuestro planeta, es un cuerpo cuya materia se presenta en tres estados: sólido, líquido y gaseoso. El estado gaseoso es la parte más externa del planeta a la que comúnmente llamamos atmósfera. En esta parte es donde se puede constatar la ley de gravedad, donde el campo gravitatorio ejerce su acción movilizadora sobre los objetos o cosas que se sitúen en esa parte gaseosa. Los objetos sólidos y líquidos como la lluvia asumen una movilidad descendente. Las cosas como el vapor de agua y el humo asumen su movilidad ascendente. El agua se presenta en todos los estados conocidos es un buen ejemplo para entender esto de la movilidad. Sólida y líquida desciende; gaseosa asciende. En síntesis, todos los estados de la materia se movilizan: unos descienden y otros ascienden. Es el fenómeno mediante el cual los estados de la materia que se colocan en la atmósfera buscan su acomodación movilizándose hacia los estados que les corresponda en los estados del sistema tierra del planeta. La materia no se destruye. Newton parcializaba el fenómeno al fundamentar la “caída” de la manzana como la “ley de la caída de los cuerpos”. Los cuerpos gaseosos también se movilizan, pero no caen.
Einstein, en la página 88 del capítulo 19 de la Teoría de la Relatividad, señala: “El campo gravitatorio muestra una propiedad sumamente notable, que es de una importancia fundamental para lo que sigue.
“Los cuerpos que se mueven bajo la influencia exclusiva del campo gravitatorio sufren una aceleración que no depende, en modo alguno, de la materia, ni del estado físico del cuerpo”. Un trozo de plomo y un trozo de madera, por ejemplo, “caen justamente con la misma velocidad del campo gravitatorio (en el vacío). Einstein también se refiera a la “caída”. Pero de modo general el campo gravitatorio debe operar de manera imparcial y general para todos los estados de los cuerpos que se sitúen en la atmósfera. Lo confirma el autor de la teoría de la Relatividad, cuando afirma “que bajo la influencia exclusiva del campo gravitatorio, la movilización de aceleración de los cuerpos no depende, en modo alguno, de la materia, ni de su estado físico. De acuerdo con la cita que antecede, es igual para todos los estados de la materia y no importa el estado físico de la materia para que la acción de la gravedad se ejerza. El estado de la materia determina su movilidad si descendente o ascendente. Las partes sólidas líquidas del sistema planetario de la Tierra obligan al descenso, y la parte atmosférica obliga a los cuerpos gaseosos a ascender.
@carlosmujica928