Ajuste de precios que varían desde 20 % a 30% de descuento se observó en distintos locales del centro de Barquisimeto.
El ajuste fue acatado desde el sábado 31 de octubre, luego del anuncio hecho por el vicepresidente de la República, Jorge Arreaza, para «garantizar la seguridad económica”.
En algunos establecimientos, como los de textiles, se hicieron largas filas para el acceso a la tienda.
Ayer, Dilcia Giménez estaba desde las 7:00 de la mañana en la cola del centro textil ubicado en la avenida 20 con calles 26 y 27.
Es costurera y para la temporada decembrina tiene varios encargos de prendas de vestir, especialmente vestidos. Dijo que el ajuste de precios le parece positivo pero manifestó su preocupación porque el negocio tiene restricción para compras al mayor.
En casos contrarios, como en los comercios de venta de artículos para el hogar y ropa íntima, los clientes no sienten atracción por el descuento y pasan de largo.
Marilú Silva entró a una tienda de calzados y carteras en donde los precios se ajustaron 20 % y salió con las manos vacías. La cartera que le gustó tenía la etiqueta de 12.500 bolívares, ni siquiera quiso calcular en cuánto quedaba con el descuento, de todas maneras, no la podía comprar.
Según la reforma de la Ley de Precios Justos, los productos deben tener a la vista del comprador el precio máximo de venta al público (PVP) y el mismo debe tener un margen máximo de ganancia del 30 %.
Algunos consumidores consultados dijeron que «el ajuste es un engaño, porque los precios fueron remarcados antes del ajuste”.
Sin embargo los dueños de los establecimientos aseguraron que están cumpliendo a cabalidad con lo establecido con el gobierno para evitar sanciones.
Se espera que la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (Sundde) realice fiscalizaciones «sorpresa” esta semana.