La penalización a quienes adquieran las divisas en el mercado paralelo para importar, tal como lo contempla la reforma a la Ley de Precios Justos, solamente va a contribuir a incrementar el desabastecimiento, asegura el presidente de la Confederación Venezolana de Industriales, Conindustria, Juan Pablo Olalquiaga.
Advierte que la divisa preferencial de 6,30 Bs/$ está destinada por Cencoex a medicinas y alimentos; la cotización del Sicad I de 12,00 Bs/$ no existe en el mercado y la del Simadi cercana a los 200 Bs/$, no ha respondido a las expectativas, siendo insuficiente para las necesidades de la economía, lo que obligaba a muchos empresarios a adquirir la divisas en el mercado libre para poder cancelar sus importaciones.
-Este es un nuevo mecanismo de control, si no te dan dólares a 6,30 a través del Cencoex, ni te los dan a a 12,00 Bs/$ de Sicad I, ni los recibes a través de Simadi, entonces de dónde los vas a sacar, aquellas personas que pueden transar entre particulares o pueden ir al mercado de la frontera y comprarlos en el mercado libre y de esa forma poder adquirir materia prima para poder traerlas a Venezuela, si no las puede costear a la verdadera tasa a la cual la va comprando, entonces deja de existir ese bien traído para el país, esa materia prima para poder ser transformada en producto terminado y hay más desabastecimiento-, dijo Olalquiaga.
Ratifica que los controles no funcionan, afirmando que este es el camino equivocado, advirtiendo que el camino correcto es el de generar el entorno en el cual haya la libertad necesarias como para que las empresas puedan empezar a tener actividad.
Ratificó en Unión Radio las cinco propuestas de Conindustria para que las empresas puedan arrancar de inmediato: -La titularización de la deuda, entre US$ 10.000 y 12.000 millones.
-Legalización de un mercado paralelo de divisas.
-Sustituir los controles de precios por el subsidio directo.
-Devolver las empresas estatizadas al sector privado.
-Devolución de la Ley de Ciencia y Tecnología a lo que era inicialmente.
