Continuando con el artículo publicado el 15/10/2015, a solicitud y en respeto a mis lectores y con el permiso que tengo del autor del mismo y con el ánimo una vez mas de enviar un mensaje en positivo a los que me leen, se den cuenta que puede más la voluntad y el trabajo honesto por encima de muchas cosas y muy lejos de la pillería.
Ya no viajaba, los fabricantes le enviaban los pedidos. Él era un buen revendedor. Con el tiempo, la gente de los pueblos cercanos prefería comprar en la ferretería, que tener que gastar días en viajes.
Un día se acordó de un amigo suyo que era tornero y herrero y pensó que él podría fabricar las cabezas de los martillos.
Y entonces, por qué no, los destornilladores, los pinzas, los cortadores, etc…
Y después estaban los clavos y los tornillos… En pocos años se convirtió con su trabajo en un fabricante de herramientas rico y próspero.
Un día decidió donar una escuela al pueblo. En ella, además de la lectura y la escritura, los niños aprendían algún oficio.
En el día de la inauguración de la escuela, el alcalde le entregó las llaves de la ciudad, lo abrazó y le dijo:
-Es con gran orgullo y gratitud que le pedimos que nos conceda el honor de poner su firma en la primera página del libro de actas de esta nueva escuela.
-El honor sería mío, dijo el hombre. Sería una cosa que me daría mucho gusto firmar ese libro, pero no sé leer ni escribir, soy analfabeto.
-¿Usted? Dijo incrédulo el alcalde. ¿Construyó un imperio industrial sin saber leer ni escribir? ¡Esto es increíble! Y le preguntó:
-¿Qué hubiera sido de usted si supiese leer y escribir?
-Eso lo puedo contestar, el hombre dijo con calma: -Si yo supiese leer y escribir… seguiría siendo el portero del prostíbulo.
Esta historia es verdadera, y se refiere a un gran industrial llamado… Valentín Tramontina, fundador de Industrias Tramontina, que hoy cuenta con 10 fábricas, 5.500 empleados, produce 24 millones de unidades varias al mes y exporta bajo su propia marca a más de 120 países. Es la única empresa brasileña en esta condición. La ciudad que se menciona es Carlos Barbosa, y está en el interior de Rio Grande do Sul.
Por lo general, las oportunidades son vistas como adversidades.
Las adversidades pueden ser bendiciones. Las crisis están llenas de oportunidades.
Si alguien te bloquea la puerta, no gastes energía en la confrontación, busca las ventanas.
Recuerde la sabiduría del agua: «El agua nunca discute con sus obstáculos, sino que los rodea”.
Que tu vida sea llena de victorias, no importa si son grandes o pequeñas, lo importante es celebrar cada una de ellas.
Unidos todos por la paz, la convivencia, el respeto y la prosperidad de nuestro país……
@JGMendozabarqto