El Consejo Legislativo del Estado Lara, fue tomado por trabajadores de la economía informal para exigir la aprobación de un crédito, el cual fue solicitado por Henri Falcón para beneficiar a los mismos.
Vendedores de café, personas que habitan en las calles y trabajadores de estrato humilde se aproximaron al lugar junto a dirigentes de las distintas fundaciones de la gobernación para pedir que fuera asignado el crédito, señalando que el mismo sería distribuido a mejoras en sus labores, pues afirman que no tienen siquiera para comprar termos nuevos para el café.
Ángel Ocanto, presidente de la Fundación Social del estado Lara (Fusel), expresó que lo solicitado sería implementado en las personas necesitadas quienes carecen de recursos para adquirir nuevos recursos de trabajo.
En algunos casos se trata de ciudadanos quienes urgen de implementos como sillas de rueda, andaderas, bastones y más.
“Luis Jonás sigue durmiendo mientras el pueblo se despierta bien temprano a trabajar para ganarse la vida y ahora no tienen material para realizar sus labores”, indicó Ocanto, quien minutos más tarde permitió la salida de algunos trabajadores que se encontraban en el Consejo señalando que “todos somos venezolanos y ellos también merecen respeto”.
El crédito fue negado por el Consejo Legislativo asegurando que gran parte de lo solicitado, sería dirigido a insumos médicos, por lo cual se consideró que lo mejor era destinarlo directamente al área salud.
Ante el déficit presupuestario los programas sociales del estado trae como consecuencia que al menos 3.280 personas se vean afectadas, según indicó Milagros Matos, presidenta de la Fundación Solidaridad, quien solicitó Bs 35 millones para continuar ofreciendo ayuda.
“Que el gobierno vea que el pueblo está en la calle y que está molesto”, indicó Betsi Mosquera, trabajadora de Funrevi quien destacó que llegó a este trabajo gracias a la labor que ha tenido el gobernador del estado en ofrecer un empleo a personas humildes.
Se señaló que la solicitud del crédito no se trata de un capricho sino de una realidad imperante que tiene a los trabajadores en malas condiciones laborales por falta de presupuesto, por lo que se espera que se considere la situación y aprueben el beneficio.