No me confío, hay que trabajar intensamente hasta que termine el proceso electoral. Hay que hacer el mismo esfuerzo que se estaría haciendo si los resultados de las encuestas fueran adversos. Venezuela necesita con urgencia un cambio político, social y económico y todo indica que el país se está inclinando por ese cambio. Todos los estudios de opinión, unánimemente,indican que la Unidad Democrática va a ganar por un amplio margen las elecciones del 6 de diciembre. Y para utilizar una expresión que se ha popularizado mucho en boca de la señora Tibisay Lucena, para este momento, 14 de octubre de 2015, esa tendencia es irreversible. El régimen ha hecho todo lo posible por revertirla pero, gracias a Dios, cada día se acentúa la búsqueda del cambio que el país entero requiere.
Venezuela podrá, a partir del 6 de diciembre, o mejor dicho, a partir de la instalación de la nueva Asamblea Nacional el próximo 5 de enero, comenzar un proceso lento y no exento de dificultades, a superar las consecuencias de los gobiernos más trágicos y destructivos que ha tenido la república desde su fundación, el de Hugo Chávez y el de Nicolás Maduro. Hará falta mucho trabajo serio, honesto, responsable, con visión de futuro para que Venezuela salga adelante. Los factores opositores al chavismo-madurismo tienen una responsabilidad titánica en esta reconstrucción del país que nos espera.
Por eso es necesaria una gran amplitud dentro de las mismas filas opositoras. Unidad hacia adentro. Todos somos necesarios, uno solo o un solo grupo no puede con esa labor que califiqué antes de titánica y quizás me quedo corto. Venezuela vive una hora definitiva, crucial, histórica, no es la hora de cálculos pequeños y de poca trascendencia. Se requiere pensar y actuar teniendo en la mira intereses superiores, que son los intereses supremos de la nación. Por eso reitero a toda la oposición que la unidad, la cohesión, la coherencia y la sindéresis son imperativos necesarios para enfrentar con éxito el porvenir de Venezuela. Este país es de nuestros hijos y nietos y sería criminal no tener el desprendimiento y cordura que fueren necesarios en esta hora. Todavía falta unidad en la oposición.
Siento repugnancia cuando oigo a un sector hablar mal de otro o a un candidato referirse en malos términos a otro. Nuestro adversario es el régimen, hacia el régimen debemos dirigir la crítica, los señalamientos y las denuncias. La capacidad unitaria de la oposición medirá su capacidad para sacar adelante a Venezuela. Este llamado, no soy nadie para hacerlo, pero me duele mucho mi país, se lo hago a quienes hacen oposición desde la Mesa de la Unidad Democrática como a quienes han preferido marchar aparte.
La MUD con todos sus defectos, es el instrumento estructurado y organizado para ganar las elecciones y luego reconstruir al país.Por esa razón votaré por sus candidatos que luego espero estén a la altura del compromiso. A los otros candidatos de oposición, mi respeto, afecto y consideración. Unidos es mejor, todavía hay tiempo.
