A primera vista pudiera parecer que el acto de predecir la economía de un país sería más propio del esoterismo que del análisis económico.
Sin embargo, los economologos, en un esfuerzo de conocimientos, observación científica, racionalidad económica y estadísticas, podríamos inferir distintos escenarios a corto y mediano plazo (Keynes señalaba que en el largo plazo todos estaremos muertos) en función del comportamiento histórico de las variables macroeconómicas a estudiar.
Lamentablemente las perspectivas, de la economía para finales de este año no lucen muy alentadoras. Eso lo señalan la mayoría de los analistas económicos en nuestro país así como empresas internacionales y organismos económicos mundiales de alta reputación.
El motivo de sus diagnósticos proviene probablemente del precario comportamiento de la economía a lo largo del 2014 producto, entre otra causas, de la disminución progresiva de los precios del petróleo, de la inacción gubernamental a la hora de tomar decisiones de política económica y de un modelo económico totalmente agotado que el gobierno insiste en aplicar.
Antes de sintetizar el desenvolvimiento de los principales variables de nuestra economía durante este año, es menester subrayar el hecho inédito de que nuestro Instituto Emisor, El Banco Central de Venezuela, quien de conformidad con el artículo 319 de nuestra Constitución “…rendirá informes periódicos sobre el comportamiento de las variables macroeconómicas del país. “no haya publicado, al momento de escribir este artículo, estadísticas algunas en lo que ha transcurrido de este año precisamente sobre el comportamiento de la economía ni de las variables que la conforman.
Un colega señalaba que “una nación sin datos es una nación ciega que esconde sus realidades (Rodríguez Aznar, El Universal, 27-09-2015).
Esas estadísticas tan importantes aportan valiosa información para elaborar estudios, diagnósticos y proyecciones sobre el comportamiento futuro de la economía. A falta de ellas, los economistas deben hacer realmente filigranas, malabares, acudir a información de fuentes secundarias y a cálculos propios para poder analizar la conducta económica a lo largo de este año y elaborar proyecciones con cierto margen de error.
Y eso es precisamente lo que vamos a realizar de manera sucinta por razones de espacio.
Como es del conocimiento público El Banco Central de Venezuela reporto un decrecimiento del Producto interno Bruto en el año 2014 de 4% y una tasa de inflación del 68%.
Ese fue su último informe sobre la macroeconomía venezolana, publicado el 31 de diciembre. La gran mayoría de los analistas económicos coincidimos en advertir que este año iba a ser más difícil que el anterior, como en efecto ha ocurrido.
Algunas razones saltan a la vista, como por ejemplo la sobreoferta de petróleo en el mercado internacional que ha estancado el precio del barril en alrededor de 40 dólares, ingresos estos que no son suficiente para financiar las enormes necesidades de un país como el nuestro, sean estas prioritarias o no’ para el desarrollo nacional.
Según cifras de la empresa Econoanalitica ( El Nacional 14-09-2015) Venezuela dejaría de percibir más de 30 millardos de dólares a finales de este año por la disminución de los precios del petróleo y según cálculos de firmas especializadas , las cuentas nacionales recibirán 44% menos divisas por esta descenso en los precios petroleros( misma fuente).
Esta caída en los ingresos ha afectado la capacidad de maniobra del Estado y su flujo de caja, lo ha llevado a disminuir el otorgamiento de divisas preferenciales al sector privado, así como el nivel de importaciones, exacerbando aún más los niveles de escasez y desabastecimiento de rubros prioritarios generando una inflación desbordada nunca antes vista.
A continuación presentaremos brevemente alguna estimaciones de las principales variables macroeconómicas realizadas por especialistas en la materia, y organismos internacionales, que han hecho sus propias cálculos, pero que jamás podrán suplir las estadísticas que lamentablemente, por razones políticas no ha publicado el Instituto Emisor, las únicas que pudieran confirmarlas o desmentirlas.
Según el economista Luis Oliveros, profesor de la UCV, pudiera registrarse a finales de este año una inflación cercana al 200%, un nivel de escasez del 50% y una caída del Producto Interno Bruto del 10%( El Impulso 04-10-2015) .
Si así fuese, estaríamos en presencia de un año con el peor desenvolvimiento económico de los últimos dieciséis años, lo que en un año electoral podría generar elevados costos políticos.
Según el economista Alejandro Grisanti, analista de Barclays Bank, se espera una contracción económica del 7% para finales de año y una inflación de 190%(Revista Dinero, agosto 2015) y como el Gobierno no tomara decisiones importantes de política económica antes del 6 de diciembre , el Banco Central de Venezuela seguirá financiando el déficit fiscal con emisión inorgánica de dinero .
De hecho la liquidez monetaria ha aumentado en un billón de bolívares en estos nueve meses del 2015, registrando un aumento interanual del 96.7% ( septiembre de 2014-septiembre de 2015) ubicándose el pasado 18 de septiembre en la histórica cifra de Bs. 3 billones 32 mil 588 millones (Diario El Mundo , 29-09-2015) , Al mismo tiempo , la producción interna ha decrecido en el mismo lapso entre 6% y 7%, generando un grave desequilibrio macroeconómico cuyas consecuencias saltan a la vista : mayor inflación , desabastecimiento e hiperinflación . Y según Francisco Rodríguez, economista Jefe del Bank of América, la presión inflacionaria puede cerrar el año en 179.8% y el descenso de la economía en 4% (El Nacional 21-09-2015).
Finalmente pero no menos importante , algunos organismos multilaterales de desarrollo como El Fondo Monetario Internacional , El Banco Mundial y la Cepal han coincidido en el mismo diagnóstico: este año el producto Interno Bruto decrecerá entre 7% y 10 % y la inflación oscilara cerca entre 180% y 200% No puede ser que todos ellos estén equivocados