¡Sorpréndanse ¡ Sin pizca de mentira, la crónica de hoy trata, ni más ni menos, de la luz en el Sol. El Sol, como se sabe, es la estrella de nuestro sistema. El Sol genera, produce, propaga y difunde su energía para todo el conjunto de cuerpos planetarios, satelitales y tantos otros del sistema. Es una energía pura, no mezclada con las partículas de la masa de la materia. Es inofensiva porque es neutral. Es imponderable (carece de peso). No es térmica, carece de temperatura. La energía en unión con la materia asume la ponderabilidad, el peso, es decir, asume el peso de la masa y, asimismo, su temperatura. En síntesis, la energía que llena el espacio interplanetario del sistema solar es neutral.
En una crónica anterior dejamos sentado que el Sol no genera, produce, propaga ni difunde iluminación. Y explicaba cómo esos puntos de luz que se observan en el cielo de la noche, es la iluminación de las atmósferas de esos cuerpos cuando uno de sus hemisferios se coloca frente al Sol; iluminación generada por la intervención de la energía solar en la energía de las partículas de la masa su atmosfera. Se puede deducir de esto que, la luz del Sol sigue el mismo proceso.
El sol es el único cuerpo del sistema que no puede tener noches. En el rige un eterno día. El Sol produce su energía mediante reacciones nucleares originadas en su interior. La liberación de la energía de esas reacciones atraviesa por convección todo el cuerpo del Sol hasta su emergencia a la superficie. Antes de propagarse por el espacio, se incorpora a la atmósfera del astro conocida como Corona. Es una atmosfera muy caliente; la energía solar interviene la energía fotónica de las partículas de esa masa atmosférica. La energía fotónica con la intervención de la energía solar transforma sus partículas en fotones de luz. Y esta es la luminiscencia de muy alta frecuencia que ilumina al Sol, y que por esa alta frecuencia no es recomendable mirar directamente hacia el Sol si no se cuenta con un medio protector de la visión.Mirar directamente al solo lesiona la vista.Es una luz solamente para la estrella del Sol. Su intensidad en las largas distancia que separan al Sol de los planetas se extingue en el espacio. Y si esta luz se propagara por con la misma intensidad inicial, el espacio se vería iluminado y en los planetas no habría no noche. En los eclipses totales de Sol se puede apreciar como el disco solar oculto por el cuerpo que lo eclipsa, deja ver en torno a él la iluminación de la Corona, la atmósfera solar.
@carlosmujica928