Ya está finalizando la época de invierno y cada vez que viajaba por la autopista Centroccidental o por la autopista de Acarigua-Guanare, no dejaba de pararme a contemplar los sembradíos de maíz y otros rubros de alimentación básicos y me vienen a la mente las diferentes preparaciones tradicionales de estos productos, que antes eran de exportación; qué tiempos aquellos cuando la producción de maíz era realizada con el sudor de la frente de muchos venezolanos, dirigidos por personas que conocían y conocen como se prepara la tierra para producir y en ese tiempo no había en la televisión ninguna propaganda que exaltara la producción con algo así: “producido con riesgo, producido con sudor de frente, comida para todos los venezolanos”; y ponga el lector cualquier epíteto.
Si hoy agarro mis escasos bolívares para salir a comprar cualquier producto que tenga la etiqueta “hecho en socialismo”, estoy casi seguro que no lo consigo barato ni caro y si por algún otro motivo está producido por el poder comunal, tengo que aceptar que no se produce más allá que para paliar el hambre de la comuna, mas como hago yo para creer que hay producción cuando no consigo las cosas, cuando compro arroz, sardinas, azúcar y atún, que en su etiqueta manifiesta importado por equis compañía para la República Bolivariana de Venezuela, sin dejar algún otro tipo de restricción como precios regulados, máximo de venta al público o (dos atún por semana) y muchas otras tonterías que nos hacen vivir en un país miserable es decir, miseria en sus tierras, en su clima, en su moneda, y no puedo dejar de decirlo y escribirlo, miseria en su gente.
Estas reflexiones en positivo tenemos que verlas, sufrirlas, estudiarlas y buscar más temprano que tarde el camino que nos permite nuestra inteligencia y nuestra edad, ya no podremos pensar que al lado de nuestras casas esta el vecino colombiano, ecuatoriano, peruano, boliviano, chileno, haitiano, cubano, para que nos arregle el carro, la llave del lavamanos, la gotera de la casa, la antena del televisor, que nos recoja el poco café o que nos ordeñe las vacas, a ese tipo de gobierno administrador de riqueza petrolera se le acabo la guachafita, no va a tener ni que vender ni que comprar incluyendo las mentiras y los votos, se acabó la Venezuela de comerciantes, incluidos los del Oriente y el Medio Oriente, porque o se produce con el sudor de la frente o se nos acentuará la miseria y la hambruna y no precisamente por conflictos bélicos ni por catástrofes naturales, se acabó la viveza criolla, organicémonos para trabajar y producir.
Por ello mi permanente ruego a Dios, porque nos encontremos en una forma pacifica, unirnos todos sin distinción, por el bien de la patria y buscar el camino de la coincidencia en aras de trabajar unidos en busca del progreso, el amor, la paz y el éxito por medio del trabajo, borrar de la mente la anticipación negativa, que abunde la voluntad de ser un servidor del país y no un servido.
Unión para dejar de buscar enemigos entre nosotros mismos y de todas partes, que cesen los remoquetes, los insultos y descalificativos, para darle un buen ejemplo a las nuevas generaciones y mostrarle al mundo entero lo positivo de nuestro país.
…Unidos todos por la paz, la convivencia, el respeto y la prosperidad de nuestro país….
@JGMendozabargto