El cineasta venezolano Lorenzo Vigas, ganador del León de Oro por su filme «Desde Allá» el pasado fin de semana, afirmó este martes que «soñaba con cualquier premio» durante su participación en el festival de Venecia.
«Yo soñaba con cualquier premio, cualquiera de los premios que hubiera caído, incluido el premio a mejor opera prima, que hubiera sido también un buen premio», dijo Vigas desde Toronto en una entrevista telefónica con la emisora Éxitos FM.
Vigas, primer latinoamericano que gana el León de Oro, subrayó que «algún premio del jurado, cualquiera de los premios de los actores, lo que fuera habría sido maravilloso, porque cualquier premio le da un impulso maravilloso a la película».
No obstante, «a medida que pasaba la ceremonia y no nos nombraban, decíamos ‘¿bueno, qué es lo qué ganamos, qué es lo qué viene?'», pensando que, «en contexto, nunca una película latinoamericana había ganado el León de Oro».
«Desde Allá», marcada por un ritmo lento, silencioso y contrastes entre un mundo íntimo árido y otro externo vital, es un retrato sombrío de las profundas diferencias de clase que sacuden a Venezuela y América Latina.
Durante su exhibición el filme fue aplaudido por la prensa especializada y, aunque dividió al público, sí convenció a un jurado presidido por el mexicano Alfonso Cuarón.
«Cuando la película fue proyectada en Venecia nos dimos cuenta de que algo había pasado, porque empezó a haber mucho ‘runruneo’ (rumores) en el festival sobre la película. Parecía que había algo en el ambiente y empezamos a oler algo pero porque sí, como que sacudió el festival», indicó Vigas.
El filme aborda -según Vigas- «las carencias afectivas y un encuentro de personas de clases muy diferentes en la Caracas de hoy, que está tan dividida socialmente. Hay un tema homosexual (en la preferencia de uno de los personajes), pero es más sobre carencias afectivas y separación de clases».
En una Venezuela con un alto nivel de violencia y con profundas divisiones sociales, Vigas considera que «Desde Allá» es una «forma de aportar algo a (su) país, a la situación actual».
El director se siente «con el compromiso como artista» de crear obras que «hagan el intento de crear polémica y controversia, de poner a la gente a hablar».
«Creo que es lo que hace falta en Venezuela, porque después viene el diálogo», añadió.
Tras su éxito en Venecia, Vigas participa en el festival de cine de Toronto en la categoría Discovery, que exhibe los nuevos talentos del mundo, pero sin competir.
