El pasado 6 de septiembre desde el parque Zoológico y Botánico Bararida, informaron sobre la muerte de Casuario, un ave muy peligrosa. Aparentemente su cadáver habría desaparecido y el día de ayer, presuntamente habría sido localizada en el inmueble de un trabajador del parque.
Se conoció de forma extra oficial que una comisión del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc), de la sub delegación San Juan, llegó a la carrera 18 con calle 38, a la vivienda de aparentemente un trabajador del Zoológico y en una bolsa negra encontraron el animal, al parecer le habría quitado las garras. La intención era disecar al animal, para posteriormente venderlo, pues su valor monetario es grande.
Aparentemente el sujeto fue detenido por la comisión y el caso lo lleva la Fiscalía 23, con competencia Integral del Ambiente y Delito de Ambiente, quienes comienzan las investigaciones a fin de determinar si existen otras personas involucradas y determinar cómo sacaron el cuerpo del animal del parque.
Se intentó conocer las versión de las autoridades del Bararida, pero indicaron que no emitirían declaración alguna para no interrumpir las investigaciones del caso.
Murió por inconsciencia
Casiuco habría comenzado a presentar un decaimiento anémico, situación que comenzaron a detectar los veterinarios del parque Bararida. Le hicieron una radiografía y notaron que tenía alojado en su intestino grueso un cuerpo extraño. Al día siguiente lo sometieron a otros exámenes y fue conseguido por el equipo de médicos sin vida. Al hacerle la necropsia, recuperaron una pelota de tenis que se había tragado.
Según explicó en su momento Santos Bálsamo, director del Zoológico, la muerte no había ocurrido por una enfermedad naturales, sino por imprudencia de un visitante.
Se conoció que Casuario, era la única de su especie que existía en Venezuela, era hembra de Australia y había llegado al Bararida en 1991, directo desde Holanda.