El ala pívot Windi Graterol, con 20 puntos, comandó el triunfo de Venezuela ante Canadá (79-78) para clasificar a los Juegos Olímpicos de Río 2016, al crecerse cuando más se le necesitaba.
“Doy gracias a Dios por la oportunidad de estar aquí, jugar y conseguir la victoria. También al pueblo venezolano que nos apoyó y a mi familia. Sabíamos que sería difícil, pero lo logramos, nunca nos quitamos. Salimos enfocados. Nos propusimos la meta y la logramos”, expresó.
No ocultó sentir “una alegría demasiado grande” porque el boleto es “aquello por lo que se sueña, más que por el título en tu país o un título personal. Esto es lo más grande, poder competir contra los mejores”, agregó antes de enviar saludos a “su gente en (el barrio) El Guarataro”.
“La clave era defender. Si no defendíamos, no íbamos a ganar. Ellos (Canadá) tienen un equipo ofensivo con muchos jugadores NBA que anotan, pero nosotros hicimos los detalles en las cortinas, las ayudas, el balance y la transición defensiva”, analizó.
Recordó que no pudo ir a los Juegos Panamericanos de Toronto “por un problema de visado” que “dejó en el pasado. “Me llamaron a la segunda selección del país, fuimos a China, estuve entrenando, me uní a la selección A en España y el coach me dijo que tenía que dar lo mejor de mí para estar en el equipo pero tenía que hacer las pequeñas cosas”.
Del mismo modo, puntualizó que “muchos no confiaban” en sus posibilidades pero el grupo “mantuvo la calma” y defendió con el corazón hasta el final.
