Este martes 15 de septiembre, en asamblea de profesores, será sometida a discusión la propuesta de no iniciar las actividades académicas en la UCLA, por cuanto la II Convención Colectiva Unificada de Trabajadores Universitarios, firmada este miércoles, no satisface los requerimientos salariares solicitados por Fapuv y el resto de las federaciones.
Débora Velásquez de Valecillos, presidenta de la Asociación de Profesores de la UCLA, lamentó profundamente que en la discusión no se abordara la cláusula 83 que estaba en la segunda convención, relativa a los beneficios salariales.
Recordó que Fapuv propuso para esta cláusula se le aumentara a los profesores el salario en un 200%, porcentaje superado luego por otra propuesta planteada por el resto de las federaciones, las cuales ninguna fueron tomadas en consideración.
Precisó que como consecuencia a esta negativa, Fapuv no firmó la cláusula salarial aprobada el miércoles por el Gobierno, ya que los profesores quedaron devengando muy por debajo de la propuesta que ellos elevaron a instancias del ministerio.
“Auxiliares, docentes e instructores pasaron a estar por debajo del salario mínimo, caso que nunca se había visto”, dijo.
Sostuvo que el Ministerio, en lugar de analizar lo planteado con el concurso de todas las federaciones, por el contrario les presentó contrapropuestas que no respetaban criterios iniciales que se habían considerado, entre estos revisar las tablas a partir de dos salarios mínimos y la movilidad necesaria para el momento de generarse un ajuste por decreto de sueldo mínimo.
Las autoridades solamente se dedicaron a presentar cuatro contrapropuestas que analizó y rechazó la junta directiva extraordinaria de Fapuv, porque irrespetaban lo previsto en la Constitución, respecto a un salario digno que satisfaga al trabajador y a su grupo familiar, sostuvo.
Recordó que para acceder a la cesta básica se requieren ocho salarios mínimos, y un docente con la actual tabla no lo puede lograr.
Deploró que la convención firmada el miércoles determina para septiembre de 2016 un ajuste del 20%. “Es ínfimo”,
Expuso que a esta legítima protesta se unirán la Universidad de Oriente, núcleo Nueva Esparta; la Universidad Simón Bolívar y la Universidad Central de Venezuela.
Sostuvo que el Gobierno debe reconsiderar la propuesta inicial de Fapuv y del resto de las federaciones porque es la que dignifica realmente al sector universitario.