Una reunión extraordinaria por parte de la Sociedad de Médicos Internos y Residentes (Somir) del Hospital Central Antonio María Pineda, tuvo ayer en horas de la mañana como punto a tratar la notificación de despido en contra de una de los galenos, el doctor Carlos Sapa, cursante del segundo año de post-grado de Medicina Crítica.
“La medida no se dio por los canales regulares, tampoco se llevó a una mesa técnica, él no tiene ningún tipo de denuncia y consideramos es un residente modelo”, expresó Junior Linárez secretario general de Somir.
Aún así, explica Linárez, se aduce que Sapa había incumplido su contratación exclusiva. “Nosotros los residentes tenemos una contratación de 8 horas diarias, 40 horas semanales y esto es falso, porque al igual que la mayoría de los residentes él tiene otro trabajo fuera de su horario laboralporque el sueldo devengado por el Hospital resulta insuficiente”.
“Sin ánimos de especular, suponemos nosotros que este despido tuvo lugar por unas irregularidades que estaba denunciando en el área de Medicina Crítica donde se desempeñaba”.
Comenta que su compañero estaría frente a un conflicto bastante difícil por tratarse del último año de la especialidad. Sólo le faltan dos meses para graduarse.
“Nosotros llamamos a la asamblea para informar sobre esta situación”.
Linárez comentó que posiblemente los jefes de servicio del área de Medicina Crítica podrían renunciar así como el cuerpo adjunto a modo de acción solidaria con el galeno.
“En caso de no resolverse en conflicto de forma conciliatoria y esperando que Sapa no sufra vejaciones o condicionamiento- sin que se vea esto como amenaza- procederíamos a solicitar a la asamblea de residentes el inicio de un pliego conflictivo en solidaridad gremial con el compañero”.