Los trabajos en la represa de Yacambú no sólo se encuentran paralizados por completo sino que, también, las instalaciones existentes fueron dejadas abandonadas por la empresa, lo que están aprovechando los delincuentes para robar lo que consideren de valor.
Eso lo pudieron constatar el diputado Guillermo Palacios y Lorenzo Monasterios, secretario general y presidente, respectivamente, de Un Nuevo Tiempo en Lara.
Preocupa a ambos que a quienes dirigen la empresa Sistema Hidráulico Yacambú Quíbor pareciera no importarles las pérdidas millonarias que esa negligencia deja.
“En el recorrido que hicimos por el portal de entrada, en La Gran Parada y en el de salida, en San José, pudimos constatar el estado de abandono en que se encuentran las instalaciones de la obra, algo fácil de verificar porque ni siquiera existe vigilancia en el sitio”, manifestó Palacios.
Indicó que esa falta de vigilancia ha permitido que sean desmanteladas partes de las estructuras y se hayan robado hasta el cableado de cobre de las redes generadoras de electricidad, equipos de aire acondicionado, máquinas conocidas como “señoritas”, implementos de construcción, de maquinarias, comedores y dormitorios, con altísimo valor en el mercado.
Otra prueba del abandono que pudieron constatar es la instalación de una reja en el portal de entrada, que, aunque endeble, es señal de que en su interior no hay nadie trabajando y que tampoco ocurrirá pronto.
“Pudimos constatar que, donde hasta hace algún tiempo había una buena cantidad de personas laborando, hoy lo que se observa es una desolación total, una soledad que estimula a la delincuencia a apoderarse de bienes, además de que nadie responde por lo que allí se pierda”, puntualizó.
Palacios, en su condición de diputado de la Asamblea Nacional, reiteró su denuncia sobre lo negativo de la paralización de la represa de Yacambú, tan importante para el desarrollo del estado Lara porque mantiene limitada la producción agrícola en el Valle de Quíbor y el suministro de agua para el consumo humano en los municipios Jiménez e Iribarren.
Igualmente reiteró su público llamado al Gobierno nacional para que apruebe los recursos necesarios, tantas veces prometidos, para que se reactiven los trabajos y algún día, lo más pronto posible, se concluyan los mismos luego de más de 40 años de espera que cada vez se hace mas larga.
Nadie rinde cuentas
El diputado Guillermo Palacios insistió en su petición de que se inste a funcionarios y ex funcionarios involucrados en el Sistema Hidráulico Yacambú Quíbor a rendir cuentas sobre los millones de dólares o bolívares que hasta ahora han sido asignados a la obra.
El parlamentario de la Asamblea Nacional volvió a preguntar por los mil millones de dólares asignados en el período 2000-2014, administrados por el consorcio Yacambú 2008 y la empresa Enmohca.
A la primera se le adelantaron recursos por el orden del 62% del total del contrato y sólo ejecutó un 29 %, lo que llevó a rescindirle el mismo, con la correspondiente pérdida de millones de dólares.
Con respecto a Enmohca, se debe explicar la adquisición por 178 millones de dólares para la adquisición de un producto denominado geomembrana destinado al revestimiento del túnel; la de 7 máquinas Mixer para su reforzamiento; igualmente la adquisición de dos camiones para el transporte, que no pudieron ser utilizados por carecer de doble transmisión.