Desde el pasado día lunes, el Hospital Pediátrico Dr. Agustín Zubillaga quedó sin quirófanos en funcionamiento por falta de aires acondicionados.
La situación que durante más de un mes ha preocupado a médicos y familiares de los menores ha ido empeorando. Hasta el lunes funcionó el único aire, que si bien no trabajaba en su máxima capacidad, sí les permitía operar algunos casos.
El poco mantenimiento que se le realiza a los mismos fue la causa para que los mismos se paralizaran en su totalidad. Los aires del área de cirugía necesitan gas para que puedan funcionar.
El Dr. César Delgado, jefe del departamento de cirugía pediátrica, explicó que la falta de los aires no les permite realizar intervenciones, no por comodidad de los médicos, sino porque trabajar sin los mismos provoca contaminación debido al calor.
Expresa que el cuidado de los elementos que conforman el hospital debería ser parte del presupuesto, sin embargo el mismo no cuenta con los fondos necesarios para realizar esta inversión.
Afectados por el hecho de no poder intervenir quirúrgicamente a menores comprenden que la situación no les compete a los médicos, por lo que se han solidarizado y han ofrecido su colaboración para ser ellos quienes costeen el gasto del mantenimiento.
De igual forma se han comunicado con instituciones como Fundasalud y Corpolara esperando que realicen un donativo, sin embargo siguen esperando respuesta.
El hospital pediátrico que recibe pacientes referidos de todo Lara, Yaracuy, Portuguesa, Falcón y Carabobo no ha podido realizar operaciones electivas.
El Dr. Delgado informó que este año “se ha trabajado con las uñas” por la falta de los materiales necesarios para realizar cualquier tipo de intervención. Los familiares costean la mayoría de los gastos.
Familiares
Los representantes de 27 pacientes oncológicos hicieron un llamado a los órganos competentes de que se hagan cargo de este tipo de situaciones.
Dignora Herrera, madre de un paciente, expresó que no es posible que en la entidad larense se invierta más dinero en obras que no merecen la atención necesaria como sí es el caso de la salud.
Los niños perjudicados tienen que someterse semanalmente a la administración de terapia por vía intratecal, esto se ha hecho imposible durante el mes en que los quirófanos se encuentran fuera de funcionamiento.
El tratamiento tiene un costo de Bs78.210 por intervención en una clínica privada. Costo que se le hace imposible pagar a los padres de los afectados.
Los familiares esperan respuesta hasta el día lunes, de lo contrario tomarán acciones de calle para que sus voces sean escuchadas. Expresan que con la salud no se puede esperar, menos en la situación de pacientes oncológicos.
El año pasado vivieron momentos difíciles al tener que pedir dinero para cubrir los tratamientos de niños que no contaban con recursos. De igual forma realizaron acciones de calle y lograron solucionar los problemas que invaden al hospital.
Hacen un llamado a la gobernación, gobierno nacional, instituciones públicas y privadas que puedan colaborar a que lo hagan, afirmando que no quieren esperar pasar por un mal momento para que sean escuchados.