Los urbanismos que se encuentran adyacentes a las quebradas o desagües, corren un alto riesgo de que el terreno ceda por la humedad presente en el suelo y las viviendas se derrumben.
Las personas que habitan en las invasiones adyacentes a estos canales de agua, viven con la ansiedad de que el flujo de líquido aumente y se desborde.
Para los padres de las familias es una preocupación constante cuando los niños juegan porque, al descuidarlos, podrían caer a la quebrada. Por lo tanto, los vecinos acordaron colocar una cerca de madera en la parte trasera de sus viviendas, para evitar que los infantes resbalen y prevenir accidentes graves.
Esta cerca colocada por los habitantes no es segura, debido a que en cualquier momento se caerá.
La ansiedad aumenta en las personas que ocupan estos terrenos, durante las temporadas de lluvias, cuando el arroyo crece notablemente. “Cuando llueve en las noches me preocupo más porque no se ve la altura de la quebrada, me da miedo porque, a pesar que nuca se ha desbordado, no quiero correr ese peligro” expresó María González, habitante de la zona.
Por otra parte, debido a la alta vegetación que existe en la quebrada y en las adyacencias, las plagas son parte de los riesgos que corren estas familias.
La reproducción de los zancudos, trae como consecuencia que los ciudadanos estén expuestos a contraer enfermedades como el dengue.
Al estar la mayor parte del día jugando en los alrededores de sus hogares, los niños son los más expuestos a contagiarse de algunos de estos virus.
No obstante, ante la densa vegetación presente en las áreas, las serpientes también representan un peligro, ya que estos animales viven en zonas húmedas y frescas.
Según los habitantes del sector La Vega, las autoridades competentes no han visitado el lugar para determinar el riesgo que existe para las familias que viven en estos espacios.
Las personas son conscientes del peligro que enfrentan todos los días, por lo cual las medidas tomadas, aunque no son suficientes, disminuyen una mínima posibilidad de un accidente.
El llamado es para que los órganos correspondientes visiten los barrios El Carmen, La Vega y el sector Cerro Gordo, ubicados al oeste de la ciudad, a objeto de que tomen en cuenta estos urbanismos.
