Los problemas que se están presentando en la avenida Uruguay deben ser resueltos por técnicos, sin la intromisión política, y es lo que se propone el Colegio de Ingenieros del Estado Lara, con las mesas de trabajo que está llevando a cabo.
Lo explicó su presidente, Damián López, aclarando que la participación del organismo en la recuperación de la arteria vial es netamente técnica, sin ningún elemento de tipo político.
Basado en los estudios realizados hasta ahora, el ingeniero López cree que la problemática está originada en el entorno urbano, específicamente en los drenajes, y debe hacerse un trabajo para que las aguas servidas no vayan al muro del terraplén, como, se presume, está ocurriendo.
Insistió en que en este caso es necesario cubrir todos los flancos enmarcados en aspectos técnicos, principalmente llevando un riguroso control de los materiales a ser utilizados en la recuperación.
Con respecto al tiempo que podrían llevarse los estudios indispensables para detener los daños a la vía, explicó que se trata de una problemática que requiere tiempo, dando a entender que la solución no puede surgir de la noche a la mañana.
Igualmente estima prudente hacer un riguroso seguimiento a la zona donde está asentada la avenida pues la ladera sur es un tramo neurálgico que se extiende desde Santa Rosa hasta El Garabatal, donde con frecuencia ocurren deslizamientos de tierra.
Igualmente considera que las fallas pudieran haberse presentado desde el comienzo, agravándose con el tiempo.
Varios técnicos han atribuido los hundimientos a daños en los drenajes que cruzan la avenida, de allí la necesidad de detectarlos y sustituir las tuberías averiadas.
¿Y no habría responsabilidades de los ingenieros encargados de la construcción de ese tramo vial?.
Eso no se ha derterminado aún, respondió, pero el Colegio de Ingenieros pasó al tribunal disciplinario a los ingenieros y arquitectos con responsabilidad en la obra, lo que no quiere decir que sean responsables pues eso lo determinará el tribunal disciplinario nacional.
Por otra parte, López propuso una serie de mesas de trabajo para analizar la situación de la presa Dos Cerritos, que por los sedimentos y otros problemas, está amenazada.
“Que no pase lo de Los Quediches, que por no haber protegido sus cuencas ahora se encuentra en crisis, amenazando el suministro de agua a Carora”, expresó el presidente del CIEL.