Si no le tienes ni el más mínimo miedo a los abismos y nada en este mundo te produce vértigo, sino que por el contrario eres amante de la presión extrema, un apasionado de la adrenalina y un fanático de las emociones alocadas, eres el candidato ideal para leer este artículo, pues a continuación encontrarás las montañas rusas más impresionantes del mundo, las joyas más preciadas de los parques de diversiones más famosos sobre la faz de la tierra
Stratosphere Tower
Si tienes la oportunidad de viajar a Las Vegas, Nevada, no puedes dejar de visitar la Torre Estratosfera, una cita ineludible con la adrenalina. Se trata de uno de los 10 edificios más altos de América y en cuya cúspide esperan por ti las atracciones más escalofriantes del planeta, entre las que destaca el Big Shot, una plataforma que se erige a 320 metros sobre el suelo y en la que los arriesgados ocupantes son elevados a una altura de 49 metros a una velocidad de 80 Km por hora, para finalmente rebotar hacia arriba sin piedad en el increíble tiempo de dos segundos y medio.
Pero si esto te parece insignificante y aún tienes ganas de más aventura, la Stratophere Tower cuenta además con el X Scream, un aparato que deja suspendidos a los pasajeros a 265 metros de altura y después los proyecta en caída libre a 50 kilómetros por hora.
Mantarraya voladora
Las mentes maestras de Sea World, en Orlado – Florida, han creado una novedosa atracción que es capaz de ponerle los pelos de punta hasta al más atrevido de los turistas, pues combina velocidades increíbles con subidas drásticas que miran hacia el cielo y descensos vertiginosos que terminan rozando el agua.
Para ser más específicos, La Mantarraya Voladora está compuesta por 6 vagones que circulan a 90 kilómetros por hora a través de una vía en forma de 8, al tiempo que sus respectivos asientos giran sin parar mientras pasan por una serie de cascadas, para finalmente caer en picada y sentir el refrescante salpicar del agua de una gran piscina, la cual le brinda a los observadores que no se atrevan a subirse a la atracción, la oportunidad de disfrutar de un espectacular acuario esférico repleto de diferentes especies marinas.
Gran Noria Singapur
Si eres un enamorado por naturaleza y tienes la oportunidad de viajar con tu pareja a la isla de Singapur, te recomendamos visitar su espectacular noria gigante, la cual es considerada la más alta del mundo y en la que podrás combinar tu lado más romántico con esa faceta salvaje que ama los precipicios.
Cuenta, nada más y nada menos, que con 165 metros de altura que regalan una vista panorámica y fascinante de la bahía del lugar, así como una mirada de las increíbles costas de Malasia.
Esta gigantesca rueda está compuesta por 28 habitáculos del tamaño de autobuses en los que los pasajeros pueden disfrutar durante la media hora que dura la vuelta, brindando también la oportunidad de alquilar los asientos más exclusivos para que los amantes del glamour gocen al máximo el recorrido en un lugar solitario, privado y encantador.
Steel Dragon
Considerada por muchos como la montaña rusa más alta, larga y fuerte del planeta, esta maravilla ubicada en el Parque de atracciones japonés de Nagashima, ofrece un recorrido de 2500 metros en el que se alcanzan velocidades de hasta 160 kilómetros por hora. Se trata de una obra maestra construida con acero a prueba de terremotos e inaugurada con motivo del cambio del milenio, fecha que coincide con el año del dragón según el calendario oriental. Sus 97 metros de cresta se encuentran enclavados en la ciudad de Kuwana, región de Mie, en un espacio temático dirigido a la diversión familiar que ofrece, además, otras joyas de gigantesca envergadura como lo es el Ciclón Blanco.
El imperio de las aguas
El Parque brasileño Beto Carrero World, es uno de los más divertidos, grandes y originales de Latinoamérica. En él, el agua es la principal protagonista y les brinda a propios y turistas un sinfín de refrescantes y húmedas atracciones, entre las que destaca El Imperio de las Aguas, un espectacular recorrido en el que los pasajeros tienen la oportunidad de practicar un ondulado rafting por el río que se mueve sin parar a velocidades extremas, al mismo tiempo que se atraviesan cavernas, cascadas y precipicios que han sido simulados con más de mil toneladas de piedra para conformar espectaculares esculturas y misteriosas cuevas.
Fórmula Rossa
El Ferrari World es un original, impresionante y atractivo parque de diversiones que se encuentra ubicado en la isla de Yas, en el espectacularmente ostentoso Abu Dabhi. En su interior, todo un mundo de opciones y atracciones esperan que los más valientes se atrevan a montarse y se arriesguen a vivir la adrenalina y diversión que experimentan los famosos pilotos de la Fórmula 1. Entre ellas, destaca la fascinante Fórmula Rossa, la cual consiste en un scalextric donde los pasajeros recorren un circuito de más de dos kilómetros a bordo de monoplazas que alcanzan velocidades superiores a los 200 km/h, lo cual representa, sin duda alguna, una experiencia única que produce la misma fuerza G que sienten los profesionales de la F1, incluidas las aceleraciones y los frenazos.
Kingda Ka
Considerada una de las montañas rusas más rápidas y altas del planeta, esta asombrosa atracción que se encuentra dentro del Six Flags Great Adventure de Jackson, Nueva Jersey, está hecha en gran parte por trozos de madera que la hacen aún más extrema, permitiéndoles a los pasajeros vivir la experiencia de alcanzar una velocidad de 206 kilómetros por hora en un asombroso tiempo de 3 segundos y medio, lo cual se logra cuando los vagones se autopropulsan hasta llegar a la altura de 139 metros para después caer en picada, generando así sensaciones increíbles y enviciantes.
Cheetah Hunt
En Tampa, Estados Unidos, a una hora de Orlando, el Busch Garden África dispone de una atracción mecánica que es la estrella de Florida. La obra de ingeniería entrelaza dos vagones con 24 pasajeros, simulando una persecución entre un tigre y un león que compiten a grandes velocidades para ver quién llega más rápido a la meta final. Al principio del recorrido, todo parece normal, pero a lo largo de los dos kilómetros de pista y a 80 kilómetros por hora atravesando bucles que proyectan las cabinas hacia vacíos casi totalmente verticales de 27 metros, el corazón empieza a encogerse y el estómago parece cambiar de lugar.
