Las condiciones para el disfrute de la temporada vacacional cambiaron para muchas familias venezolanas, debido al alto costo de vida y a los compromisos (adquisición de útiles, uniforme y calzado) que trae consigo la época previa al inicio de un nuevo año escolar.
La realidad se suma a los problemas de abastecimiento y al aumento constante del costo de muchos insumos necesarios en los hogares, lo cual lleva a estimar que la mayoría de las familias se debate entre invertir el dinero adquirido con su bono vacacional en disfrute y recreación o en la compra de implementos escolares y alimentos.
Si una familia conformada por dos adultos y un niño decide combinar el disfrute de las vacaciones, con un viaje modesto a la playa durante cuatro días y tres noches, con los compromisos educativos, debe disponer de alrededor de 60.000 bolívares. Sin incluir, la posibilidad de enviar a su hijo o hija a un plan vacacional.
Vacaciones costosas
Un fin de semana (desde el día viernes al lunes) en Chichiriviche, estado Falcón, en una posada equipada con cocina, requiere de una inversión aproximada de 23.000, en especial si la familia decide trasladarse en una o dos oportunidades a los cayos.
El traslado en lancha depende de la lejanía de la isla y el precio mínimo es de 2.200 bolívares; el alquiler de la posada durante las tres noches suma 10.500 bolívares; el costo de los toldos con tres sillas también depende del cayo, el monto mínimo es de 600 bolívares y los platos de mariscos y pescados pasan de los 1.000 bolívares.
Algunos optan por adquirir otros alimentos más económicos que se ofrecen en estos espacios como cachapas (Bs.. 200 cada una) o mariscos y pescados a la vinagreta (ceviche, camarones, calamares, entre otros) desde 600 bolívares en adelante.
A la inversión se debe sumar el dinero utilizado para adquirir los alimentos que son preparados en la cocina de la posada, como alternativa para ahorrar dinero.
En la playa la gente disfruta pero al mismo tiempo expresa comentarios negativos sobre el incremento de precios, en comparación con años anteriores, y sobre la disminución de la calidad del servicio prestado en varias áreas, debido a la escasez de insumos o los altos costos. Entre ellos, se observa el deterioro de las sombrillas y el mal estado de algunos muelles.
Quienes optan por los servicios de paquetes turísticos deben cancelar alrededor de 25.000 bolívares en el paquete todo incluido de la cadena pública de hoteles de Venetur, dependiendo del destino, según las tarifas vigentes hasta el próximo 16 de septiembre y publicadas en el portal www.venetur.gob.ve.
Si se decide por un operador turístico privado los costos se elevan 8.000 bolívares por persona, por noche.
Por las nubes
En el caso de la canasta escolar se debe destinar unos 12.000 bolívares para el uniforme (dos camisas, un pantalón azul, la franela y el mono deportivo), otros 12.000 bolívares para los zapatos escolares y deportivos, y entre 12.000 y 15.000 bolívares para cubrir la lista de útiles, lo que da un total estimado de 35.000 bolívares.
El costo viene acompañado por los problemas de abastecimiento que registra el sector, lo que encarece el precio de muchos rubros como cuadernos y resmas de papel, a medida que pasan las semanas y se acerca el inicio del año escolar.
En detrimento
El alto costo de los insumos escolares no está a la par de la calidad de los rubros, que según la Cámara Venezolana de la Industria Educativa y Materiales de Oficina (Caveo) va en descenso.
“Ya no se utiliza papel base 20 para los libros y cuadernos sino uno más rústico, de menor gramaje y ya no es extrablanco sino gris, como consecuencia de la escasez de materia prima y de la importación necesaria para abastecer la industria nacional”.
La resma de papel tamaño carta oscila entre 2.800 bolívares y 3.600 bolívares; los cuadernos pasaron de 80 bolívares a 470 y hasta 650. El Gobierno asegura que las listas de útiles escolares no son obligatorias, pero muchos padres optan por adquirir los rubros disponibles para garantizar el bienestar de sus hijos en los planteles.
El Ejecutivo Nacional inició el pasado 26 de agosto ferias escolares que se extenderán en todo el país y en las cuales prometen un ahorro de hasta 500% en útiles y uniformes.
Baja afluencia
El equipo de este rotativo realizó un recorrido por el Aeropuerto Internacional Jacinto Lara y por el Terminal de Barquisimeto, para conocer las cifras de la movilización de temporadistas.
En el aeropuerto indicaron que no están autorizados para declarar y que las cifras estarán disponibles cuando culmine la temporada, luego del 16 de septiembre, y serán difundidas por la página web del Ministerio de Transporte Acuático y Aéreo.
En el Terminal de Pasajeros también se espera por el cierre de temporada para realizar un balance, sin embargo a mediados del mes de agosto el director Levinson Campos declaró a los medios de comunicación que la cantidad de pasajeros diarios disminuyó de 35.000 a 25.000, debido a la baja disponibilidad de autobuses, una consecuencia de la escasez de repuestos y del alto costo.
El presidente de la Cámara de Turismo de la entidad, Antonio Morales, dijo a este rotativo que las reservaciones de camas en las posadas se redujeron 20 % con respecto al 2014, aunque el sector mantiene la esperanza de disminuir esa brecha en lo que resta de la época vacacional.