Desde las 6:00 de la mañana, familias de los sectores I, II y III de La Orquídea, protestaron en la entrada de Pavia, porque desde hace veintitrés días no tienen acceso al agua potable, debido al retraso que existe en el envío de camiones cisternas por parte de Hidrolara.
El drama que viven más de cuatrocientas familias motivó las acciones en la vía que se mantuvo cerrada por dos horas, hasta que funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) obligaron a los manifestantes a retirar los obstáculos colocados en el pavimento.
Una vez reabierto el paso, la multitud se quedó en los alrededores de la carretera para expresar sus quejas además del malestar que sienten por la “ineficiencia” de la hidrológica del estado Lara, incluso intentaron cerrar por segunda vez el camino pero la estrategia no funcionó.
Algunas personas indicaron que uniformados amenazaron con regresar y disipar la protesta con equipos especiales.
Por su parte, las amas de casa afirmaban que la ausencia de vital líquido les ha dificultado el desarrollo de las labores domésticas, ante la escasez deben comprar botellones a precios exorbitantes para sobrevivir.
Solicitan más cisternas
Habitantes de La Orquídea exigen a Hidrolara una mejor distribución del recurso natural, en tal sentido plantean que sea aumentada la capacidad y frecuencia de los camiones cisternas.
Voceros indicaron que los diez tanques asignados para el sector son insuficientes y no logran satisfacer las necesidades de las familias, por ello piden elevar la cuota a treinta y dos.
Mediación
El grupo de manifestantes pedía que alguna autoridad de Hidrolara se acercara para conversar con ellos.
Lourdes Jiménez, indicó a EL IMPULSO que pudieron dialogar con Marcos Rodríguez, un representante de la empresa en la zona. En el encuentro él acordó buscar una solución y en caso de que no cumpla las protestas continuarán.
