La comunidad del 23 de Enero, cerca de Nueva Segovia, Barquisimeto, presenta distintas problemáticas. petra_villanueva me comenta vía Instagram que por un lado, «hace quince meses Hidrolara contrató una empresa chimba para cambiar la red cloacal de la calle y fue peor, dejaron unas zanjas inmensas abiertas y han prometido y prometido y no cumplen». Reclaman entonces que arreglen lo que echaron a perder en este asfaltado.
En cuanto al alumbrado público, la oscuridad se instala de noche, con todos los peligros que esto representa: «Tenemos 1 año sin luminarias, esto es triste y lamentable».
Y como todo ciudadano de este país que no esté en las altas esferas del poder, el desabastecimiento también afecta a esta dama. «Estás de primero en la cola y quedas de 40 porque llegan los bachaqueros, amenazan con armas o amedrentamiento y el que proteste lo agreden, toda una calamidad».
Me gustaría finalizar este post con una reflexión que también me deja la señora Petra: «Dios, ¿qué nos pasó a los venezolanos? Parece que nos entró un conformismo. Me niego a aceptar la ineptitud y la desidia de estos gobernantes que vinieron a causarnos tantos males».
