Venezuela acude al Mundial de atletismo de Pekín, que comienza este sábado, con un equipo compuesto por trece deportistas, entre los cuales las principales bazas de acceder a finales son la campeona panamericana de martillo, la larense Rosa Rodríguez, y el equipo de relevos.
El país sólo ha conseguido entrar una vez en una final mundialista, con el también crepuscular Eduar Villanueva en los 1.500 de Daegu-2011, donde finalizó en octava posición. Hasta entonces, el país sólo había conseguido superar la primera ronda en una ocasión, cuando Williams Wuyke llegó a semifinales en los 800 metros de Roma-1987.
La progresión del atletismo venezolano con la final de Villanueva en Corea del Sur se vio acompañada en los Juegos Olímpicos de Londres-2012 con un séptimo puesto del equipo de relevos formado por Arturo Ramírez, Alberto Aguilar, Albert Bravo y Omar Longart.
Décima en el ránking
Pero si en una prueba parece posible estar de nuevo en una final es en el lanzamiento de martillo con Rosa Rodríguez, reciente campeona panamericana y que con una marca de 73 metros y 6 centímetros está décima en el ránking del año.
Rodríguez también estuvo cerca de la final hace dos años en el Mundial de Moscú, quedándose con 69,35 metros, cuando le bastaba con 70 metros para meterse en el concurso decisivo por las medallas.
Será el cuarto mundial para la lanzadora larense, pero el primero en el que parece con opciones reales de hacer un gran papel, sobre todo después de su oro en los Panamericanos de Toronto el pasado mes. También será interesante seguir el debut mundialista de Robeilys Peinado, que competirá en el salto con pértiga, donde fue campeona mundial juvenil hace dos años en Donetsk (Ucrania).