Un nuevo caso resuelto. Para muchos no es suficientes en comparación a la cantidad de asesinatos que se cometen mensualmente en Lara pero los funcionarios de la División de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas de la región, lograron aprehender a tres personas por el asesinato de Valmore Daza Torres, de 61 años, ocurrido el 28 de agosto del año pasado.
Yadira Coromoto Durán de Daza, de 40 años, al parecer planificó con su hija, Yulieth Noemí Daza Durán, de 21 años, el asesinato de su propio esposo y padre de un pequeño de ocho años que procrearon juntos, pues la joven, supuesta autora intelectual del crimen, sólo llevan el apellido pero se cree no era hija biológica del difunto.
Durán de Daza y su extinto marido perduraron por más de 20 años juntos en matrimonio, viviendo en un sector de Cubiro, municipio Jiménez. La relación se mostró desestabilizada por un tiempo, pues al parecer tenían muchos problemas de pareja que finalmente, terminaban en golpes de él hacia ella, pues aparentemente, y según allegados a la propia familia de la víctima, la dama de 40 años mantenía relaciones con otros hombres, lo que enfurecía a Daza Torres, a pesar que ella decía ser cristiana evangélica.
Cuenta una de las familiares del fallecido que desde hacía cinco años hasta el momento de su asesinato ya la situación había mejorado entre ellos, “sin embargo, esa mujer seguía viéndose con otros hombres.
Él estaba muy enamorado, incluso le decían al momento dónde estaba ella con otros y él prefería irse a dormir que verla”, confesó la dama a quien se le resguarda la identidad por posibles repercusiones en el caso.
Yulieth Noemí Daza Durán tampoco se la llevaba bien con su padrastro, siempre estaba junto a la madre. A diferencia del pequeño varón de ocho años, quien estaba junto a su progenitor en todo momento.
Entre julio y agosto del año pasado, las mujeres tenían un amigo perteneciente a la religión o creencias de los babalaos.
Ese hombre responde al nombre de Darwin José Pinela Rodríguez, de 24 años, quien estaba siempre junto a ellas.
Entre los tres, se presume y según las investigaciones de los sabuesos del Cicpc, planificaron el asesinato del hoy occiso. Para ello contrataron a dos sujetos, a quienes les cancelaron una fuerte suma de dinero.
Cabe destacar que entre la pareja conformada por Daza y Durán, también nació otro varón de 18 años, quien para el momento del homicidio de su progenitor se encontraba fuera de la ciudad trabajando.
Días antes regresó a Cubiro y le dio a su madre ocho mil bolívares para que ella cancelara deudas y los disfrutara, lo que nunca imaginó es que esa plata fue usada para pagarle a los hombres para que matarán a su padre.
Los hechos
Pasadas las 09:00 p.m., del 28 de agosto de 2014, funcionarios del Cicpc recibieron una llamada desde Cubiro, les informaron que había un ciudadano asesinado, como ya es costumbre en este país, se fueron tranquilos pero al llegar se sorprenden al ver el cadáver del hombre, quien presentó golpes, más de 30 puñaladas y aparentemente, lo habían ahorcado con el cable de una plancha.
Iniciaron las investigaciones de los expertos; tomaron las pruebas necesarias y los testimonios que iban a ser clave, para lo que pareciera ser una novela o un cuento de terror pero es la lamentable historia real de una familia larense.
Al parecer, el asesinato del hombre de 62 años, se cometió con la presencia de su hijo que hoy día tiene ocho años de edad. Para el momento del homicidio, lo habrían encerrado en el baño, pues cuando sus allegados le preguntaban por lo ocurrido, siempre mostró una actitud sospechosa.
Con el pasar del tiempo y testigos claves, los funcionarios de la División de Homicidios, se comunicaron con Daza de Durán y su hija, al igual que con Pinela Rodríguez, a quienes citaron a la sede y al llegar, le mostraron la orden de aprehensión emanada por un juez de control larense inmediatamente, los detuvieron.
Hasta el momento, falta la detención de los autores materiales del atroz crimen.