La carretera Barquisimeto-Río Claro permaneció cerrada al tránsito automotor durante más de seis horas este lunes, en el sector Los Sauces, por una protesta de representantes de varias comunidades reclamando agua potable.
Muy temprano, mujeres y hombres de sectores como Manzano Abajo, Los Trujillanos, La Plazuela, Los Tubos y de Los Sauces, colocaron restos de árboles, cauchos viejos y otros objetos, impidiendo el paso de vehículos en ambos sentidos.
Quienes venían procedentes de Río Claro y puntos intermedios o iban de Barquisimeto hacia la parroquia Juares, se encontraron con el cierre de vía.
Algunos pensaron que la protesta sería levantada pronto y esperaron, aunque los conocedores de la zona optaron por buscar una vía alterna, en este caso la que una a Agua Viva con El Manzano.
“Tenemos un mes sin recibir una gota de agua por las tuberías y no hay quien nos diga cuándo van a solucionar el problema. Ya estamos cansados de esperar”, dijo Carmen Adjunta, una de las participantes en la manifestación.
Agregó que, además de la falta de agua, también tienen problemas con el suministro del gas doméstico, viéndose obligados a madrugar para esperar el camión que lo lleva a Río Claro.
Igualmente se quejó del mal servicio del aseo urbano cuyos camiones recolectores, afirmó, tardan días en pasar a recoger los desperdicios.
“Los que si llegan puntuales son los recibos, más caros que los de la luz”, agregó.
Mientras se mantenía la manifestación, uniformados de la Policía de Lara permanecían atentos en el lugar para impedir cualquier acto de violencia.
Quienes bajaban de Río Claro, El Manzano, y los numerosos caseríos ubicados a un lado de la carretera hacia la capital de la parroquia Juares, en vehículos del transporte colectivo, no tenían más remedio que bajarse, cruzar la barricada caminando y llegar hasta el puente Macuto con la esperanza de abordar otra unidad con destino al centro.
Yorbis Alvarado, residente en Los Tubos, afirmó que en el sector no les llega el agua por tuberías desde hace más de dos meses.
¿Tampoco por camiones cisternas?
Por cisternas si llega, respondió, pero no es apta para el consumo humano pues es un agua amarilla, con mal olor, que sólo puede ser utilizada para regar las matas, no para beber ni preparar los alimentos.
Crisálida Ortíz también estaba en medio de la carretera, hasta donde llegó en su silla de ruedas.
Dijo que no podía faltar a la protesta porque, como todas las familias de la zona, en su casa también necesitan agua potable, que sirva para el consumo humano.
Hizo un llamado a quienes dirigen Hidrolara para que, al menos se preocupen por el agua que les suministran en cisternas, que sea apta para el consumo humano.
Foller González, por su parte, expresó que el año pasado hicieron varias protestas por la misma causa y que la de ayer fuer la primera en el 2015, “pero no será la última sino nos resuelven el problema”.
También informó que varias veces les han ofrecido llevarles los ya tradicionales tanques azules y hasta ahora no han recibido ni uno, de allí que tienen que buscar todo tipo de recipientes para guardar el líquido vital.
“De aquí no nos movemos hasta que venga alguien de Hidrolara a decirnos cuándo van a resolvernos el problema”, se le escuchó a una de las mujeres manifestantes.
La protesta se prolongó hasta después del mediodía cuando, luego de seis horas, el tránsito fue reanudado al ser retirados los escombros ante una promesa de resolver las deficiencias.
Comunidades aisladas
Cada vez que se registra una protesta en la carretera Barquisimeto-Río Claro, en especial si ocurre antes de El Manzano, habitantes de numerosas comunidades del sur de la ciudad quedan prácticamente aisladas.
“Ellos podrán tener razón en su reclamo, pero somos nosotros, los que vivimos en El Manzano, quienes sufrimos las consecuencias y muchos nos vemos imposibilitados de acudir a nuestros trabajos, a consultas médicas o cualquier diligencia”, manifestó una joven que esperaba en la parte sur de la barricada la reapertura de la vía para llegar a Barquisimeto.
Planteó la necesidad de que tan pronto ocurra un cierre de tan importante arteria vial en reclamo de servicios públicos, se presente alguien a dialogar con los manifestantes y de esa manera el tránsito pueda reanudarse.
“No hay derecho que tengan que esperar horas y horas para venir, hablar con ellos, escucharlos y comprometerse a resolverles la situación, lo que al final hacen, pero después que quienes no tenemos velas en el entierro lo hayamos llorado”, precisó.