Seis de los 18 privados de libertad que permanecen detenidos en el Destacamento 121 de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), se autoflagelaron ayer al mediodía, en rechazo a que supuestamente no le dejan pasar alimentos.
Según los familiares de los aprehendidos, anteriormente les dejaban pasar comida pero desde hace un tiempo para acá, se lo prohibieron, “le dan arroz quemado con sardina y no a la hora. Queremos que nos dejen traerle comida y no que se la coman los guardias como ha pasado en muchas ocasiones”, expresó una de las mujeres que estaba afuera del lugar pero que no dio a conocer su nombre por miedo a represalias.
“A ellos les están violando los Derechos Humanos. Es verdad, ellos cometieron un error y deben pagarlo pero tampoco es para que los estén matando de esa manera”, refirió la dama.
Ella tiene desde hace seis meses privado de libertad a su hijo, quien le ha manifestado que en ningún momento lo han maltratado “pero ayer salió una muchacha de ahí y me dijo que les habían pegado mucho ya que, decidieron iniciar una huelga de hambre también”.
La falta de comida no sólo es la problemática que presentan, sino también el hacinamiento, pues en el Destacamento 121 de la GNB, no cuentan con calabozos para retención mayor a 76 horas, por lo que a los que tienen ahí, deben ponerlos hasta con esposas en los pasillos del lugar, según comentaron los allegados a ellos.
La escabiosis los invade Igualmente, comentaron que las enfermedades no escapa de los privados de libertad.
La escabiosis es la que más presentan pero no les dejan pasar medicamentos para mejorar su salud.
“Adentro tienen una fuerte contaminación y no quieren que les demos remedios para que estén mejores de salud”.
Afirmaron que la fiscal 13, con competencia penitenciaria no les ha dado respuesta, tampoco se había apersonado para conocer la situación.
Al la Emergencia del Hospital Central Antonio María Pineda, no ingresaron ninguno de los hombres que se cortaron, pues al parecer, los trasladaron hasta el Hospital Militar José Angel Álamo.