Recientemente el ministro de Agricultura y Tierras, Yván Gil, otorgó a productores del Programa Integral de Desarrollo Lechero (Pidel) Bs. 369 millones en créditos, “aporte que representa una gran ayuda para el sector, cuyo principal problema es la falta de preparación preventiva ante la época de sequía”, en palabras de Andrés Kowlaski, director de la institución.
Cifras Pidel
El programa lechero agrupa a 10.240 productores de un aproximado nacional calculado por encima de los 100 mil, con lo cual se podría interpretar que las cifras aportadas por el organismo privado, representan el 10% de la realidad del país.
Kowlaski destacó que en la actualidad se calculan 5,22 litros de leche promedio de producción por vaca y 118 litros por finca, números que “serán siempre positivos”, puesto que anteriormente no se contaba con cifras al respecto.
Apuntó que según sus cálculos en Venezuela se producen 6 millones de litros de leche por día, mientras la demanda es de 9 millones; el diferencial históricamente se ha repuesto a través de la importación.
Falta inversión
El experto en producción agroalimentaria, Rodrigo Agudo, sostuvo, por su parte, que el Gobierno pretende dar la impresión de que existe una consolidación de la producción lechera.
“Así como invierten mil millones de dólares en importación de leche, maíz y arroz de Uruguay, debieran invertir este dinero en Venezuela”.
Apuntó que en los últimos años, no ha habido un crecimiento del sector, a pesar del aumento en la demanda país del producto, lo cual se traduce una pérdida per cápita.
“En 2013 se produjeron cerca de tres mil millones de litros y en 2014 dos mil millones, si a esto se suma una inflación de tres dígitos y la falta de insumos, difícilmente este año, haya crecimiento alguno”, manifestó.
Agudo señaló que años atrás Venezuela importaba sólo 33% de la leche demanda por la población, pero ahora ingresa al país el 66% de lo requerido, producto del crecimiento poblacional, que no ha sido parejo con la producción.
“El problema es de estructura; se perdió la confianza. Se requiere de trabajo en conjunto y no de dádivas”,.
El especialista señaló que el sector incluso se ve afectado por el retraso en el pago del diferencial que el Gobierno debía cancelar a empresas procesadoras de leche, para así mantener los subsidios del producto.