La magia, sutileza y belleza de la danza clásica destacaron durante la celebración aniversaria y de fin de año escolar de la Academia de Ballet Taormina Guevara.
La gala por los 66 años de fundación se llevó a cabo en el Teatro Juares, lugar donde más de 120 alumnas demostraron en escena entrega, coordinación con la música, así como también control absoluto de los movimientos ligeros, sutiles y elegantes que realizaron.
Dilia Pérez Flores, profesora y directora artística de la institución, preparó un repertorio variado que estuvo bajo la interpretación de los grupos infantil y juvenil, conformados por niñas desde los cinco años hasta jóvenes de veinticuatro.
Polkita, Marcha, Estudio, Antes Polka, Dulce Ilusión, Golosinas, Concierto de Oboe y Mazurka fueron las piezas que integraron la primera parte de la función que fue ovacionada por el público.
Los colores brillantes y explosivos marcaron la segunda fase del espectáculo que dio vida a Mundo de Juguetes, Entre Sueños, Vals de la Serenata y Grand Pas de Quatre, momento en el que las pequeñas ejecutaron divertidas coreografías.
Con Strauss Pas, Danza de las Horas, Paquita, Victory, Alegría y Quimera quedó en evidencia la disciplina, de igual modo el equilibrio total que existe entre el cuerpo y la mente de las bailarinas. Las piezas dieron punto final al encuentro que tuvo gran receptividad.
Representantes orgullosas
Las madres presentes en la sala se mostraron complacidas con el resultado del espectáculo, organizado en cuatro meses gracias al esfuerzo de las profesoras de la academia.
Yelitze Mendoza, madre de una de las participantes, precisó que la Gala Clásica es una tradición y se hace en honor a Taormina Guevara, barquisimetana que en 1949 inició su carrera profesional de bailarina tras obtener una beca de estudio en el exterior.
“Ella es ejemplo para todas las niñas que se forman en la academia y que quieren brillar en un futuro” expresó la dama, mientras reconocía que esta disciplina requiere de muchos sacrificios, tiempo y compromiso, además de una vida saludable.
Ejemplo de lucha
Dilia Pérez Flores asegura que el trabajo en la Academia de Ballet Taormina Guevara es arduo, pero cuando hay entrega el resultado siempre es positivo.
Las ganas de aprender que demuestran las niñas, la inspiran, le permiten crear y motivar a quienes sienten atracción por el ballet.
“La meta es graduarlas, convertirlas en técnicas de ballet cuando terminan el bachillerato, para que demuestren sus habilidades” precisó la directora.