Compromiso en Libertad, rezaba el lema de la 71º Asamblea Anual de Fedecámaras, razón por la cual dicha agenda contó con un apartado especial, dedicado a la libertad y algunas de sus expresiones.
Para disertar sobre libertad económica, asistió como ponente el abogado Antonio Canova, quien aseguró que el principal beneficiario de que esta exista es el ciudadano, ya que al haber competitividad entre las empresas, producto de la misma libertad, existe diversidad de oferta.
“Básicamente la libertad económica es una manifestación de la libertad individual, puesto que con esta los ciudadanos desarrollan su vida, toman sus bienes, los organizan y producen”. Por tanto esta supone libre empresa, libre mercado y libre competencia.
En tal sentido, afirmó que en Venezuela no sólo existen empresarios deseosos de competir en el mercado, sino también seudoempresarios que evitan que exista libertad económica, ya que sólo desean trabajar en un clima amaparado por el Estado, el cual les permita no tener competencia.
“Libertad económica significa soberanía del consumidor… por eso que las personas deban apoyar esta y el Estado aportar condiciones para invertir libremente”.
Aseguró que en Venezuela no existe libertad económica, puesto que se encuentra en manos del Gobierno, en múltiples sentidos. Al no existir, todos los ciudadanos dependen del Gobierno.
“Este modelo económico no funciona en ningún lado del mundo”, comentó Canova, quien considera que el país requiere abandonar las ideas “fracasadas” de control.
Advirtió que, incluso, antes de la época del chavismo, Venezuela carecía de libertad económica plena, no obstante, esta ausencia se ha intensificado con los años.
Libertad política
Luis Alfonso Herrera fue el encargado de tratar la libertad política. En tal sentido, apuntó que esta se encuentra delimitada por el Estado de Derecho y la democracia.
“En Venezuela las libertades políticas no están bien garantizadas, porque cada vez existen menos posibilidades de mantener las condiciones de propietario, y a partir de esa condición, actuar como ciudadanos en el ámbito de la política, manifestando su propio pensamiento u optando por cargos de elección popular, aun cuando no se concuerde con la línea política del Gobierno”.
No obstante, en Venezuela se carece de división de poderes y por tanto de un sistema democrático.
Apuntó que la democracia no debe ser entendida como la tiranía de la mayoría, sino el respeto de las minorías y respeto de la libertad individual.
Libertad de expresión
Por su parte, Marianela Balbi, presidenta del Instituto Prensa y Sociedad (Ipys), señaló que existe un profundo problema en Venezuela en esta materia, al punto de permear hacia varios sectores de la sociedad y no sólo el de los medios de comunicación.
“La falta de libertad de expresión no es un problema único de los medios, sino también del ciudadano… y poco se comenta que esta también es garantía de los derechos humanos”, manifestó.
En tal sentido, recordó que la libertad de expresión respalda la diversidad, pluralidad e independencia de los medios de comunicación. Por tanto, expresó que esta es un ejercicio vinculado a la democracia, el cual facilita el dialogo.
Advirtió que la sociedad que no maneja información no cuenta con las herramientas necesarias para la toma de decisiones, lo que también se traduce en un obstáculo al pleno ejercicio económico.
Considera conveniente que se garantice el acceso a la información pública y cultura de la transparencia, vista la comunicación como mecanismo para el resguardo de los derechos económicos y sociales.
Cierre con optimismo
Para cerrar la asamblea, subieron a escenario tres venezolanos que creen en los retos y en el potencial de Venezuela, quienes con sus anécdotas, en distintos campos de la sociedad, sirvieron de motivadores para continuar con el “Hecho en Venezuela”.
Uno de los ponentes fue el ingeniero agrónomo Gustavo Moreno, quien con su ejemplo invitó a “sembrar Venezuela”, a creer en el país y cultivar esa semilla de esperanza y prosperidad.
Lo acompañó el empresario y miembro del Proyecto Cumbre, Martín Echeverría, quien con relatos de sus expediciones dio muestra de que ninguna meta es imposible cuando se realiza con empeño y se lleva a Venezuela en el corazón, aun cuando se esté en el polo norte.
Junto a ellos el agente FIFA, fotógrafo y motivador, Donaldo Barros, quien invitó a los empresarios presentes a tratar con ternura, paciencia y humildad a Venezuela, al compararla con el dominio del balón de fútbol.
“Deben saber que son parte de un cambio en su tierra y que nadie los puede igualar… Tengan por seguro que a la gente buena le va bien”.
Exhortó a los presentes a quedarse en Venezuela y asumir los retos que les pone el país, puesto que sólo los venezolanos, son los únicos capaces en asumirlos.
