Desde hace dos meses, habitantes de la carrera 13B entre calles 48 y 49 de Barquisimeto, sector San Vicente de Paúl, antigua comunidad Caja de Agua, enfrentan el problema del colapso de la tubería matriz de cloacas.
Ismari de Orellana y Antonio Escalona, vecinos perjudicados, indicaron que Hidrolara está en conocimiento de la situación, a través de los reportes números 333134 y 335228, de los que les ha quedado constancia.
Los declarantes señalaron que ha sido tanta la omisión demostrada por la empresa hidrológica del estado Lara, cuya sede está a dos cuadras del problema, que hasta la fecha no se ha dignado a ocuparse del caso, el cual se agrava con el paso de los días.
Precisaron que con las últimas lluvias caídas sobre la ciudad las aguas de la cloaca principal de la calle se devuelve y brota por los lavamanos, pocetas, inodoros y lavaplatos de los hogares de la zona.
Esta situación se ha convertido en un estado de zozobra para las familias, ya que les está generando un peligroso foco de contaminación.
Escalona, quien dijo trabajó durante 27 años en el recordado Instituto de Obras Sanitarias (INOS), sostuvo que los trabajos de reparación de esa cloaca tardan apenas un día y no requieren mucha inversión, pero debe existir voluntad por parte de quienes dirigen a Hidrolara para acometerlos lo antes posible.
Denunció que al lugar se apersonó un ingeniero y le comunicó que la obra se ubica a un costo de 80 millones de bolívares fuertes, por lo que afirmó este ingeniero estaba siendo muy exagerado respecto a la cifra que esgrimió.
Advirtieron que si no se solventa esta afectación de un momento a otro las aguas cloacales invadirán más viviendas y emergerán en los baños de la Unidad Educativa Bella Vista, lo que dejaría a decenas de niños sin clases, en detrimento de su formación académica.
Puntualizaron que en reiteradas ocasiones han sacado con tobos hacia la calle las aguas negras que entra en sus casas, siendo esta acción deplorable.
Un mes esperando solución de Hidrolara
Este domingo 19 de julio se cumplirá un mes desde que las cloacas de la carrera 19, entre calles 29 y 30 se desbordaron dentro de un negocio comercial familiar que se encuentra ubicado en ese lugar desde hace más de 50 años.
La falla es del sistema de cloacas de la avenida, no del local, sin embargo, a pesar de las continuas llamadas a los representantes de Hidrolara, (reporte número 339246), no se ha podido resolver el problema, mientras el trabajo y los clientes se pierden, como expresaron las trabajadoras Belinda Bejarano y Yajaira Medina, preocupadas por el temor de perder su empleo.
Aunque por fuera no se observa la inmundicia, los olores se sienten incluso en los negocios vecinos, y no han podido entrar porque todo está lleno de aguas negras, foco de contaminación que debería ser atendido de inmediato por Hidrolara.
En la primera ocasión que fue una cuadrilla, narran sus trabajadores, sólo evaluaron cuál era el problema, dijeron que debían volver con un “compresor”, cuál fue la sorpresa que la vez siguiente que los visitaron expresaron: “Se necesita un compresor”, situación que ya debían saber de antemano pero que al parecer no les habían informado.