El Decanato de Ciencias de la Salud de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA) impartió cátedra en la calle con una actividad denominada Pupitrazo. La masa estudiantil y docente tomó los seis canales de la avenida Libertador en protesta por un problema de dimensión nacional: la escasez presupuestaria en las academias y los bajos salarios que perciben los trabajadores. Los jóvenes académicos anunciaron el cese de actividades con la posición de asamblea permanente.
“¿Quiénes somos? ¡Estudiantes! ¿Qué queremos? ¡Presupuesto!” exclamaba la comunidad académica que enfrenta problemas como escasez de reactivos para laboratorios de medicina, deterioro del sistema de aire acondicionado integral en el 70% de las aulas, equipos de investigación obsoletos, becas con montos insuficientes, detrimento de las providencias estudiantiles, estancamiento de proyectos de actualización de planta física y la pérdida del poder adquisitivo de profesores, empleados administrativos y obreros.
En la congestionada avenida instalaron pupitres y pizarras, donde profesores de diversos decanatos le explicaban a sus alumnos la importancia del conocimiento para el desarrollo intelectual de una Nación, el cual se traduce en crecimiento desde el punto de vista social, político, económico, académico y cultural.
Con pancartas en mano y acompañados de cánticos al unísono, rechazan la indiferencia del Gobierno Nacional por la crisis presupuestaria generada a través la reconducción de recursos desde hace más de nueve años. Consideran que esta realidad dista del proceso de transformación universitaria anunciada por el Ejecutivo Nacional, más aún cuando en la actualidad existe un conflicto académico por la devaluación de la meritocracia académica por la implementación del Sistema Nacional de Ingreso.
“Nuestras universidades están perdiendo progresivamente su reconocida calidad académica. Cada mes se nos van profesores para el extranjero por la crisis; no tenemos reactivos ni materiales médicos quirúrgicos para las prácticas; tampoco gozamos de estabilidad en las providencias estudiantiles porque dependen de créditos adicionales enviados por el gobierno”, denunció Karen Parra, presidenta del Centro de Estudiantes de la facultad.
“Además, gran parte del aire acondicionado presenta fallas, situación que nos preocupa porque por las características del edificio y nuestras labores dependen de un espacio refrigerado”, añadió la joven al momento de informar que la comunidad estudiantil afectada alcanza los 2.200 jóvenes cursantes de Medicina y Enfermería.
UCLA Profesores y trabajadores presionan
El gremio docente ha sido uno de los principales protagonistas de protesta en los últimos días. Los profesionales actualmente cumplen una medida de paro escalonada con la aplicación de dos y tres días de clases a la semana, debido a los retrasos presentados en la discusión de los términos económicos de la II Convención Colectiva Única del sector universitario, cuya disposición se encuentra vencida desde el mes de diciembre.
“El dinero no nos alcanza para vivir dignamente. La inflación se ha comido nuestros salarios. Actualmente no gozamos del prestigio económico que tenía un profesor universitario en el pasado. Hemos vivido situaciones muy difíciles, desde la escasez de insumos hasta el desprendimiento de una puerta de un bus que utilizamos para las prácticas. Estamos muy graves”, expresó la profesora de Ciencias Veterinarias Bennadette Anzola.
La comunidad académica no descarta la realización de más actividades de protesta durante esta semana.
Esperan por la pronta inyección de recursos vía crédito adicional y la firma del acta laboral, de lo contrario no estarán dispuestos a regresar en el mes de septiembre.
