Trabajadores del Ministerio del Ambiente, actual ministerio de Ecosocialismo y Aguas protestaron ayer en la sede principal en la Av. Intercomunal Barquisimeto- Cabudare en horas del mediodía, exigiendo remuneraciones laborales y derechos constitucionales.
Alrededor de 30 trabajadores reclamaban sus derechos laborales ante las autoridades. La principal causa es la división de la estructuración del ministerio de Hábitat y Vivienda, ahora llamado Ministerio de Ecosocialismo y Aguas, factor que produjo las rebajas en los sueldos, la inestabilidad laboral, la eliminación del bono vacacional y otros beneficios.
El problema se generó el 2 de septiembre de 2014, cuando el presidente de la República Nicolás Maduro señaló su decisión de revisar los ministerios, por presuntos hechos de corrupción. El sacudón resultó la fusión del ministerio del Ambiente con el ministerio de Hábitat y Vivienda. De ahí lo vuelven a separar del ministerio de Ecosocialismo y Aguas, según refirió el trabajador Efraín Castellano.
“Después que nosotros ingresamos al ministerio Ecosocialismo Hábitat y Vivienda, nos bajan el sueldo, nos quitaron los beneficios, como las primas de profesionalización, la suspensión del pago de los HCM, la antigüedad, la prima por hogar e hijos, además nos quitaron los bonos vacacionales”, alegó Castellano, reiterando la violación de la ley del Trabajo y la Constitución Nacional.
Aclaró que antes de las restructuraciones estaban ganando un salario digno generado por un tabulador y actualmente cobran salario mínimo, exigiendo que se les devuelvan las justas remuneraciones.
El trabajador profesional 1 Edward Martínez, informó que la lucha se está realizando de igual manera en Caracas. El próximo jueves 2 de julio, a nivel central va a haber una asamblea de los trabajadores a nivel nacional para definir si procede un paro nacional.
A nivel nacional entre 5.000 7.000 trabajadores padecen las consecuencias de tal situación. En el estado Lara, 200 personas, sin distinción política se seguirán reuniendo a una sola voz. Muchos tienen más de 35 años de trayectoria laboral. “La clase obrera exige justicia laboral”, adujo Alba Rodríguez, trabajadora.