El Gabo, como le decían cariñosamente, fue uno de los máximos representantes de la literatura hispana del presente siglo, un escritor que supo cómo hacernos soñar, un amante de las letras que nos regaló, a través de sus fascinantes historias, una puerta abierta al arte, a la cultura, a la vida. Sus relatos, nos llevan a lugares tan lejanos como interesantes, párrafos seductores que nos atraen con tal fuerza que logran sumergirnos en un mundo, a veces real y veces fantasioso, pero siempre aventurero y osado
Genial hasta las vestiduras, el gran Gabriel García Márquez batalló contra la ignorancia a través de sus fantásticas historias, narraciones repletas de imaginación y mucha sabiduría que pusieron en evidencia su inigualable nivel cultural, sus ganas de transformar este mundo en un lugar mejor mediante la difusión del conocimiento y ese humor tan característico de este inolvidable héroe de la escritura latinoamericana.
Y es que para este colombiano del mundo, nacido en Aracataca, ser periodista y escritor no le fue suficiente, por lo que ampliando aún más sus horizontes finalmente se convirtió en toda una enciclopedia viviente, en un excelente guionista y cuentista de corazón, en uno de los mejores novelista de la historia y hasta en editor, oficios de los que se valió para hacerle llegar a toda la humanidad ese legado de sapiencia humilde e inmortal que hasta el sol de hoy lo mantiene vivo y triunfante en nuestras memorias.
En resumidas cuentas
Haber sido reconocido con el codiciado Premio Nobel de Literatura, antecede cualquier tipo de presentación, pero bien vale la pena decir que si en este mundo hay personas que se lo hayan merecido, él es sin duda alguna una de ellas, entre otras cosas por haber gestado desde su ingenio el nacimiento del Realismo Mágico, un importante movimiento literario, y por darle vida a “Cien años de soledad”, novela que llegó a convertirse en uno de los grandes clásicos hispanoamericanos de todos los tiempos.
Y es que irrefutablemente influenciado por sus abuelos maternos, con quien vivió durante sus primeros años y de quienes aprendió infinidad de cosas que luego plasmaría en sus obras más destacadas, Gabo, fue desde muy joven un apasionado de la lectura, un entusiasta de la escritura y un eterno enamorado de Mercedes Barcha, su fiel esposa y madre de sus dos hijos. En sus obras, siempre destacó el humor y un estilo cambiante que se pasea principalmente entre el Realismo y el Realismo Mágico, tratando temas como la soledad, Macondo, la violencia y la cultura.
Pero si a ver vamos, y tratándose de un personaje tan reconocido y afamado como Gabriel García Márquez, hablar lo ya hablado no tendría sentido alguno, por lo que hoy más que hacer referencia a su biografía, queremos rendirle un sentido homenaje trayendo de vuelta a la vida algunas de sus frases más célebres y recordando su extensa y prolífica obra, esa que entre páginas repletas de sentimiento y portadas que invitan a seguir adelante, nos adentran en un mundo tan maravilloso como su creador mismo.
Un universo de obras
Novelas
-La hojarasca
-El coronel no tiene quien le escriba
-La mala hora
-Cien años de soledad
-El otoño del patriarca
-Crónica de una muerte anunciada
-El amor en los tiempos del cólera
-El general en su laberinto
-Del amor y otros demonios
-Memoria de mis putas tristes
Libros de cuentos
-Los funerales de la Mamá Grande
-La increíble y triste historia de la Cándida Eréndira y de su abuela desalmada
-Ojos de perro azul
-Doce cuentos peregrinos
Reportajes
-Relato de un náufrago
-La aventura de Miguel Littín clandestino en Chile
-Noticia de un secuestro
Teatro
-Diatriba de amor contra un hombre sentado
Memorias
-Vivir para contarla
Obra periodística
-Textos costeños
-Entre cachacos
-De Europa y América
-Por la libre
-Notas de prensa
-El amante inconcluso
-Gabo periodista
Entrevista
-El olor de la guayaba (con Plinio Apuleyo Mendoza)
Discurso
-Yo no vine a decir un discurso
Talleres de cine
-Cómo se cuenta un cuento
-Me alquilo para soñar
-La bendita manía de contar
“Si uno no crea, es cuando le llega la muerte, cuando no escribo, me muero, y cuando lo hago, también”
“Lo único que me duele de morir, es que no sea de amor”
“El mundo habrá acabado de joderse el día en que los hombres viajen en primera clase y la literatura en el vagón de carga”
“He aprendido que el mundo quiere vivir en la cima de la montaña, sin saber que la verdadera felicidad está en la forma de subir la escarpada”
“Los seres humanos no nacen para siempre el día en que sus madres los alumbran, si no que la vida los obliga a parirse a sí mismos una y otra vez”
“Hemos perdido en cien años las mejores virtudes humanas del siglo XIX: El idealismo febril y la prioridad de los sentimientos: El susto del amor”
“El éxito no se lo deseo a nadie. Le sucede a uno lo que a los alpinistas, que se matan por llegar a la cumbre y cuando llegan, ¿qué hacen?, bajar, o tratar de bajar discretamente, con la mayor dignidad posible”
“El secreto de una buena vejez, no es otra cosa que un pacto honrado con la soledad”
“Recordar es fácil para quien tiene memoria, olvidar es difícil para quien tiene corazón”
