Los comercios del municipio Simón Planas, concretamente en Sarare, La Miel y Manzanita, confrontan un desabastecimiento de productos de la cesta básica en el orden del 70 por ciento, lo que origina largas colas cuando llega algo de lo regulado.
Lo informó Magín Pérez, presidente de la Asociación de Comerciantes, en compañía de Rafael Cen, vicepresidente.
Agregó que artículos regulados, como leche, harina precocida, jabón, de baño y de lavar, papel toalet, pañales desechables y otros, llega en muy pocas cantidades y cuando ocurre es a precios altos.
Pérez también se refirió a la situación que están confrontando los propietarios de carnicerías por la falta de suministro del producto, lo que ha dejado como consecuencia, prácticamente, el cierre de seis de ellas.
El dirigente de los comerciantes de Simón Planas pidió la intervención del gobierno para regularizar el suministro cárnico con los cortes regulados porque actualmente no reciben nada o muy poco, pero a precios por encima de la regulación, lo que impide a los comerciantes de ese ramo operar pues “nadie puede trabajar a pérdida”.
Agregó que lo mismo ocurre con el pollo, también desaparecido de los comercios de Sarare, La Miel y otras poblaciones del municipio, mientras de manera permanente se pueden ver los camiones cargados de ellos salir de Palavecino y otros sectores del estado Lara hacia otras entidades sinque ninguna autoridad haga algo para impedirlo y de esa manera acabar con el desabastecimiento de ese tipo de carne.
Magín Pérez también fue consultado sobre la inseguridad que hasta hace algunos meses afectaba a todo el comercio local y dijo que la misma ha bajado , pero no producto de acciones policiales sino porque los delincuentes, al ver las colas de personas, optan por no cometer atracos.
Sin embargo, reiteró los llamados formulados en otras oportunidades para que sea incrementada la cantidad de policías asignados al centro de coordinación de Sarare, así como los vehículos para que puedan llevar a cabo los patrullajes.
El dirigente del comercio también se refirió al sistema de lagunas de oxidación de Sarare, cuya construcción se encuentra paralizada desde hace años, perdiéndose las millonarias inversiones que se han hecho.
Con respecto a los apagones, otro problema que tradicionalmente ha afectado a la población, considera que se han reducido últimamente, aunque todavía el servicio no es lo óptimo que se desearía para toda la colectividad.
