Para afrontar una enfermedad como el cáncer se requiere de dinero y tiempo. Ambos son esenciales para poder cumplir con los tratamientos establecidos para la cura de los pacientes.
Diariamente, una cantidad considerable de madres con sus hijos, provenientes de diversas regiones del país, acuden al estado Lara para ser atendidos en los centros hospitalarios que cuentan con especialistas en el área de Oncología.
Las mamás para poder movilizarse hasta los centros de salud tienen que disponer de los recursos suficientes para el pago de los pasajes, comidas, medicinas, hospedaje y cualquier otro imprevisto que se les pueda presentar. El gasto que les corresponde asumir, en la actualidad, está por orden de los tres mil y cuatro mil bolívares aproximadamente.
Cabe destacar, que no todas las personas cuentan con una liquidez monetaria que les permita cubrir a cabalidad el tratamiento de esta enfermedad. Partiendo de este hecho, la Fundación de Amigos del Niño con Cáncer (Fanca), decidió hace 14 años acondicionar una vivienda (ubicada en la urbanización La Concordia, vereda 6, Nº 21) para ofrecerle a los niños y a sus madres, un espacio en el cual pudieran pernoctar y estar resguardados.
Sin embargo, las condiciones de la casa en aquel entonces no eran las más adecuadas. Por lo cual, la directiva de Fanca decidió cerrarla para iniciar un proceso de reconstrucción y remodelación. Esta iniciativa se llevó a cabo en un lapso de tres años.
Abrió sus puertas
Ayer, se inauguró nuevamente este albergue, el cual está lleno de hermosos colores y detalles, que sin duda, serán del agrado de los más pequeños.
María Elena Dufoir de Mantovani, presidente de Fanca, expresó su agradecimiento a Dios y a todas las personas que hicieron posible que este “sueño se convirtiera en una realidad pese a las circunstancias que atraviesa el país”.
“No me alcanzan las palabras para agradecer todo el apoyo que hemos recibido a lo largo de todos estos años. Son muchísimas las personas que de una manera u otra han hecho posible que hoy día contemos con estos maravillosos espacios, los cuales fueron creados con mucho amor y cariño para todos los niños”.
Explicó que esta casa abrigo cuenta con cinco habitaciones, baños, cocina, lavandería, una sala de usos múltiples y un patio con un área exclusiva para la recreación. Estiman recibir diariamente un promedio de 18 infantes con sus mamás, a quienes les proporcionarán las tres comidas, entre otras atenciones.