Hace unos años, Luis Alberto Machado aceptó ser ponente en unas jornadas que tenía un grupo de universitarios. Pero entonces sucedió algo insólito: los jóvenes le mandaron un correo electrónico pidiéndole la ponencia con antelación “para hacerle correcciones y recomendaciones”. ¡Yo me quedé de una pieza! ¡Unos imberbes queriendo corregir y hacerle recomendaciones a uno de los hombres más brillantes de este país! Traigo a colación la historia por las recientes declaraciones del vicepresidente Arreaza en la Cumbre de los Pueblos, donde invitó a Europa a «tomar lecciones» de los modelos latinoamericanos.
«En nuestros países han surgido modelos políticos y económicos que hoy están garantizando que el hambre disminuya radicalmente, que nuestras personas tengan más acceso a la salud, educación, trabajo, vivienda, que haya mayor producción para alimentarnos, para generar trabajos productivos»…
No voy a hablar de Latinoamérica, pero sí de Venezuela. El vicepresidente no sabe que después de dilapidar 3 billones de dólares en los últimos 16 años, tenemos los mismos índices de pobreza de cuando comenzó el gobierno chavista. Que se necesitan 3,7 sueldos mínimos para cubrir solo la canasta básica de una familia de 5 miembros. Que en los hospitales les piden a las personas que lleven todo ¡todo! porque no tienen insumos. Que pacientes con enfermedades crónicas no cuentan con sus medicamentos porque el gobierno no otorga las divisas. Que cada vez más niños y adolescentes desertan de las escuelas, donde cada vez hay menos maestros y profesores por los sueldos de miseria que les pagan. Arreaza como que no sabe que los bachilleres que se gradúan en los liceos no cursaron varias materias científicas.
Tampoco parece darse por enterado que tenemos el sueldo mínimo más bajo del continente, porque el cálculo ficticio lo hacen con el dólar a Bs. 6,30. No parece saber que las viviendas construidas –las que sirven- se han hecho con enormes sobreprecios y pingües ganancias… ¿quién va a querernos imitar?…
La guinda de la torta es que cuando hablaron de soluciones “neoliberales”, Arreaza, además de sentirse “incómodo”, puso como ejemplo de “pueblo que se protegió del neoliberalismo” a Cuba. Hambre, miseria y esclavitud.
¡Que hable con Giordani! Ahora que “despertó” tal vez lo aterriza.
@cjaimesb
