Por las dos caras donde se mire la moneda hay una conclusión en relación al debut de la Vinotinto en la Copa América, y es que se asume, por una cara, el reto mayor de igualar o rebasar la vara alta de las semifinales de la pasada edición en Argentina y, por la otra, cruz o envés, el también reto del técnico Noel Sanvicente, quien asiste a su primer compromiso oficial desde que fuera designado seleccionador nacional el mes de julio de 2014.
La tarea luce ardua, empinada porque los rivales son de gran calibre, primero (hoy) Colombia, el jueves 18 Perú y para cerrar el domingo 21, el todopoderoso de siempre Brasil.
La cita dominical con la oncena colombiana al frente es gruesa al presentar el cuadro rival todo su armamento pesado con el dueto Radamel Falcao-James Rodríguez como principales bazas, además del peso de la historia, porque en choque de la Copa América, el fiel de la balanza a su favor con cuatro victorias y un empate.
El técnico argentino al servicio de Colombia, José Pekerman, otra de las garantías lo tiene más claro al declarar que “somos candidatos por razones obvias.
Tenemos a la mayoría de los jugadores que estuvieron en el Mundial. Queremos ratificar por qué Colombia tuvo esa actuación”.
Pekerman, probablemente mueva las piezas del esquema exhibido en Brasil 2014, cuando, por la obligada ausencia de Falcao por lesión, dejó a Teófilo Gutiérrez como único atacante soportado por cuatro volantes, con James Rodríguez en función de mediapunta. Los resultados, un inolvidable e histórico cuarto lugar.
Transición venezolana
Venezuela, que en la añeja cita continental de naciones apenas ha podido vulnerar la valla colombiana un par de veces, en la derrota (4-2) en Brasil 1989, acude con el soporte de lo conseguido hace cuatro años en Argentina y el trabajo que durante un mes se cumplió en tres etapas: primero en Margarita, luego en Mendoza-Argentina y finalmente en Chile.
También lo hace con un equipo en transición al contar con 12 de los jugadores encabezados por Juan Arango que estuvieron en Argentina y el resto, jóvenes que apuestan al futuro como figuras, lideradas por Salómon Rondón, de apenas 25 años de edad como referencia en la línea de ataque.
Rondón, en los días previos declaró que “sabemos que éste partido no será para nada parecido a lo que ocurrió en las eliminatoria pasada, pero trataremos de sumar los tres puntos”.
La referencia estaba dada en que Venezuela en el clasificatorio a Brasil 2014, en Parque Cachamay, el 26 de junio de 2013, venció a Colombia 1-0.
Sanvicente, sordina en mano ha dejado saber que Chile puede ser el laboratorio perfecto de cara a las eliminatorias mundialistas, pero los aficionados, los afiebrados vinotinto sedientos de buenos resultados, los exigen de inmediato, como el de la tarde de hoy en Rancagua donde se cumplirá el choque.
El técnico criollo tampoco quiso adelantar una alineación posible, salvo el conocido trabajo con Arango retrasado en la línea medular, al igual como lo hace ahora en México y Rondón arriba, a la espera de un compañero de ataque que estaría entre Nicolás “Miku” Fedor o Josep Martínez, quien a pesar de su juventud, 22 años, viene con la experiencia de lo recogido con el Torino de Italia.
