La amenaza de cierre que pesaba sobre el diario El Carabobeño está a punto de concretarse. Ese medio ha sufrido antes la falta de un suministro seguro de papel, por parte del Complejo Editorial Alfredo Maneiro, pero esta vez la existencia de ese insumo se ha agotado a tal punto que la continuidad en la publicación del octogenario periódico del centro del país, podría verse interrumpida, situación que pone en peligro 300 puestos de trabajo. Eduardo Alemán Pérez, director de El Carabobeño, ha advertido sobre la “velada intención” de lesionar la credibilidad del medio. “Cuando estamos a punto de quedarnos sin papel denunciamos la situación, aparecen algunas bobinas y también el compromiso de mantener un envío permanente. Esto último no se cumple, por lo que debemos volver a denunciar. Quizás quieren que la gente piense que estamos mintiendo”. Alemán Pérez considera que el origen de este problema radica en la no liquidación de las divisas, para que cada diario pueda importar el papel que requiere. Interpreta el silencio del Complejo Editorial Alfredo Maneiro y del gobernador Francisco Ameliach, como indicativo de que buscan el cierre definitivo del periódico.
Carolina González, jefa de Información de El Carabobeño, expresó que actualmente discuten diversas estrategias a seguir. “Contamos con pocas alternativa porque ya se está agotando el papel de la revista, nos vimos obligados a suspender el suplemento infantil, estamos saliendo con 16 páginas pero por las propiedades de la rotativa no podemos disminuir más el número de páginas”.
Explica González que han tratado de potenciar la página web, para publicar los contenidos del diario a través de este medio en caso de que en definitiva dejen de circular como edición impresa.