Venezuela rechazó el martes un reciente pronunciamiento de Guyana sobre un área marítima que es reclamada por ambos países y consideró la acción del gobierno guyanés una peligrosa provocación.
Las tensiones generadas entre Caracas y Georgetown por el descubrimiento de un yacimiento petrolero en aguas frente la costa norte de Sudamérica tuvieron el martes un nuevo capítulo cuando la canciller Delcy Rodríguez objetó a nombre del gobierno venezolano el comunicado que emitió Guyana criticando un decreto del presidente Nicolás Maduro sobre zonas operativas de defensa integral que incluyen un área marítima en disputa desde hace varias décadas.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Guyana acusó el lunes a Venezuela de representar una «amenaza para la paz y la seguridad en la región» al ampliar mediante decreto sus reclamos territoriales en el Océano Atlántico. Agregó que cualquier intento de Venezuela de hacer valer sus reclamos será «resistido con firmeza» y señalado ante la comunidad internacional.
«Es inadmisible que el nuevo gobierno de Guyana asuma esta posición con un territorio que está sujeto a controversia», dijo Rodríguez al leer un comunicado de la cancillería.
El gobierno venezolano lamentó que la norma administrativa emitida el mes pasado por Maduro para organizar la asistencia de las nuevas tecnologías de información en labores de supervisión y protección marítima fuera tomada por Guyana para «escandalizar e intentar de crear una crisis artificial inventando situaciones irracionales contra un país hermano como Venezuela y utilizando un lenguaje altamente ofensivo», refirió el comunicado.
Agregó que «el nuevo gobierno de Guayana exhibe una peligrosa política de provocación contra la Venezuela bolivariana de paz» y exigió una inmediata rectificación.
«La única y sorprendente agresión es que el gobierno de Guyana haya permitido a una transnacional poderosa como la Exxon Mobil incursionar en un territorio en reclamación entre ambas naciones», agregó el escrito.