A las 9:40 de la noche del viernes se escuchó el sonido de una moto y seguido de esto un disparo. El proyectil le dio en la cabeza a Gilberto Antonio Mendoza Rivero, de 48 años de edad.
El disparo fue mortal, su cuerpo se desplomó y cuando familiares fueron hasta el final de Carorita Abajo, sector La Victoria, estaba sin vida.
Gregoria Mendoza comenta que era el tercero de cuatro hermanos y desde hace más de 20 años se dedicaba a la albañilería, también tenía conocimientos de carpintería. Sobre lo que pasó Mendoza comenta que fueron dos motorizados que le dispararon a su hermano, justo en el momento en que venía de visitar a un vecino y se dirigía a su hogar. Desconoce si tenía enemigos, pues indica que era una persona bastante reservada.
Lo que sí indicó la mujer es que la madre le había contado que tenía días viéndolo un poco pensativo, pero nunca llegó a indicar si tenía algún tipo de problemas.
Con su muerte quedan cuatro hijos huérfanos de padre, entre ellos una adolescente de 13 años de edad. La víctima fatal la conocían en la barriada como Beto y no tenía prontuario.
